El gobierno de Guillermo Lasso en Ecuador podría terminar en “Muerte Cruzada”
Este procedimiento consta de la destitución del presidente y del congreso para realizar un llamado prematuro a elecciones.
La tensión entre el gobierno de Guillermo Lasso y las agrupaciones sociales ha puesto a Ecuador en una situación inestable. Los últimos 12 días dejaron un saldo de 5 manifestantes fallecidos, 166 heridos, 108 detenciones y 5 desaparecidos. Ahora un grupo de legisladores proponen la “Muerte Cruzada” para traer el fin del actual gobierno y llegar a buenos términos con los manifestantes.
Unión por la Esperanza (UNES) es la bancada que propuso mediante una carta al Presidente de la Asamblea Nacional de Ecuador, Virgilio Saquicela, el pedido de debatir en el Parlamento la destitución del presidente Lasso. "Comprendemos el reclamo generalizado de la población que exige que nos vayamos todos", dijo la banca UNES a través de su cuenta de twitter oficial.
Este mecanismo de destitución se conoce en Ecuador como “muerte cruzada”, mediante el cual el vicepresidente asumiría la presidencia y en un plazo máximo de siete días el Consejo Nacional Electoral convocaría, en esa misma fecha, a elecciones legislativas y presidenciales anticipadas.
La propuesta de UNES cuenta con el apoyo de los parlamentarios del movimiento indigenista Pachakutik Dina Farinango, José Chimbo, Mireya Pazmiño y Peter Calo.
Según el artículo 130 de la Constitución de Ecuador se establece que el Parlamento puede destituir al presidente de turno en los siguientes casos: Por arrogarse funciones que no le competan constitucionalmente, previo dictamen favorable de la Corte Constitucional; por grave crisis política y conmoción interna.
La carta que recibió Saquicela marca que el mismo Lasso, al declarar el estado de excepción en varias provincias por las protestas, afirmó que se vive una “grave conmoción interna” en el país.
Para aprobar la “muerte cruzada” hacen falta 2 tercios de votos positivos en la Asamblea Nacional. Hasta ahora la bancada legislativa de la Izquierda Democrática y la del Partido Social Cristiano se declararon en contra del proceso.
Hace falta recalcar que, el año pasado y a raíz de un bloqueo de proyectos por parte del Parlamento a las propuestas del partido gobernante, Guillermo Lasso habló de la posibilidad de accionar un artículo que le permite al mandatario disolver el Congreso. Esta maniobra también llevaría a elecciones legislativas y presidenciales anticipadas, una “muerte cruzada”. "Es una salida constitucional pero drástica, que probablemente sea inevitable", declaró Lasso al respecto de la “muerte cruzada” en aquella ocasión.