Irak: mil muertes anuncian una cruenta guerra civil
Según la ONU, hubo una escalada de víctimas fatales. El ejército islámico avanza sobre la capital y crece la tensión en el país
El avance del Ejército Islámico de Irak y el Levante (ISIS, por sus siglas en inglés) representa una amenaza no sólo para Irak sino para toda la región y hace pensar que todo derivará en una guerra civil.
Es una preocupación que manifestaron observadores y líderes políticos, incluido el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry en su reciente visita a ese país.
En este sentido, los países vecinos de Irak son los más vulnerables frente a la ofensiva de la milicia yihadista, que ante la poca resistencia que enfrentó a su paso, fue tomando ciudades y pueblos en Irak.
Muchos activaron sus defensas luego de que se produjeran varias incursiones fuera de Irak durante el fin de semana.
De acuerdo con un reporte realizado por la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas para Irak (Unami, por sus siglas en inglés), al menos 1.075 personas murieron y otras 1.189 resultaron heridas entre el 5 y el 22 de junio. "Al menos 757 civiles murieron y 599 resultaron heridos en las provincias de Ninive, Diyala y Salaheddine entre el 5 y el 22 de junio, mientras otras 318 perdieron la vida y 590 resultaron heridas, siempre en el mismo período, en Bagdad y en las regiones del sur", precisó el vocero del Alto Comisionado, Rupert Colville. En tanto, en mayo, murieron más de 900 personas.
Esta cifra comprende una serie de ejecuciones sumarias y extrajudiciales de civiles, policías y soldados. Y prosiguen los secuestros en las provincias del norte del país y en Bagdad.
La ONU precisó que entre los secuestrados hay algunos extranjeros. El Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL), según la ONU, difundió decenas de videos que muestran tratamientos crueles, decapitaciones y fusilamientos de soldados, agentes de policía y personas en la mira por su religión o etnia.
La crisis en Irak se agudizó hace dos semanas, cuando milicianos del EIIL tomaron el control de las principales ciudades del valle del Tigris. El avance de esa agrupación, que quiere instaurar un califato sunita en Irak y en Siria, puede reeditar la violencia sectaria que entre 2006 y 2007 casi separa al país y hoy, amenaza con el mismo destino en el marco de una Guerra Civil que se viene anunciando con hechos sangrientos día a día.
