La despenalización del aborto entró en vigencia en Uruguay

Finalmente, luego de que haya sido aprobada en octubre pasado y reglamentada por el Ministerio de Salud Pública, la despenalización del aborto entró ayer en vigencia en Uruguay. La nueva ley contempla que tanto uruguayas como mujeres extranjeras con más de un año de residencia pueden someterse a esa intervención de acuerdo con la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo. 

La nueva norma no legaliza técnicamente el aborto, sino que lo despenaliza antes de las doce semanas, siempre que se sigan ciertos procedimientos regulados por el Estado, hasta catorce en caso de violaciones, y sin restricciones para el caso de malformaciones del feto o riesgo de vida para la madre.

Las mujeres podrán solicitar que se les practique un aborto en cualquier centro sanitario público o privado, que a partir de esta jornada “están obligados a realizar la intervención o a garantizar que ésta se haga por terceros en casos de objeción de ideario”, destacó a radio Carve Leticia Rieppi, directora de Salud Sexual y Reproductiva del Ministerio de Salud Pública.

En principio, dos centros médicos vinculados a la Iglesia católica anunciaron que recurrirían a esa “objeción de ideario”, pero “hasta ahora ninguna (institución) se presentó para cumplir con ese trámite”, agregó Rieppi.

A pesar de que hasta ahora estuvo penado por la ley, en Uruguay cada año se realizan más de 30.000 abortos, según cifras oficiales, aunque la realidad podría doblar ese número, señalan organizaciones no gubernamentales.

De acuerdo a una encuesta difundida el pasado mes de septiembre, el 52 por ciento de los uruguayos está a favor de la despenalización del aborto, el 34 por ciento en contra y el 14 no tiene posición tomada o prefiere mantenerla en reserva.