Recrudece el asedio a Gaza

Israel bombardeó la Franja desde mar y aire. Gobiernos extranjeros buscan evitar la invasión.

Mientras el premier hebreo Benjamín Nethanyahu amenazaba con que su ejército podría “extender las operaciones” militares, Gaza, la capital de la Franja, era bombardeada ayer desde el mar por la poderosa marina de Israel, en tanto los letales aviones F-16 surcaban los cielos arrojando muerte y destrucción sobre la población civil.  El saldo del conflicto, irreductible a los números, es tras su quinto día de más de setenta muertos palestinos y tres israelíes. 

“La cárcel a cielo abierto más grande del mundo”, como llama el filósofo Noam Chomsky a la Franja de Gaza, se prepara para una posible incursión terrestre del Ejército judío. Sin fuerzas armadas propias ni posibilidades de defenderse, la población civil clama ante la inerte y ya trillada “comunidad internacional”, que alude al “derecho de Israel a defenderse” o habla de guerra y no de invasión o aniquilamiento de un pueblo despojado de su tierra y sus recursos.   

En Jerusalén, Nethanyahu aseguró que con los ataques, Israel hizo pagar “un alto precio a Hamas y a las organizaciones terroristas. Las Fuerzas de la Defensa están preparadas para una importante extensión de las operaciones”. Cabe decir que la gran mayoría de las víctimas fueron civiles, nueve de ellos niños menores de diez años. 

Sin embargo, el ministro israelí de Relaciones Exteriores, Avigdor Lieberman, afirmó que la primera condición para cualquier acuerdo de alto el fuego “es el completo cese de todos los ataques con cohetes contra Israel”, pese a que el poder de uno y otro es incomparable y las milicias palestinas han arrojado apenas una decena de cohetes semi caseros, dos de los cuales llegaron hasta Tel Aviv pero fueron destruidos en el aire por el sistema de defensa antimisiles Cúpula de Acero.

Por su parte, la Autoridad Nacional Palestina, que gobierna en Cisjordania con Mahmud Abbas, pidió con urgencia una cumbre de jefes de estado árabes y envió a un funcionario a Gaza para intentar impedir una invasión terrestre. La organización advirtió, no obstante, que la actual situación no impedirá que los palestinos sigan adelante con su iniciativa de solicitar el reconocimiento de la ONU como Estado observador de la organización el próximo día 29.

A nivel internacional, los esfuerzos para alcanzar una tregua son encabezados por el presidente de Egipto, Mohamed Mursi, en tanto los gobiernos de Alemania, Gran Bretaña y las potencias occidentales se limitan a pedirle a su aliado en Medio Oriente que no se arriesgue a invadir la Franja por tierra. Movilizaciones se organizaron en Europa ante las embajadas, y el repudio al accionar del Estado de Israel crece en todo el mundo. Pero, hasta el momento, ningún gobierno intenta realmente detener lo que puede convertirse en una masacre contra el pueblo palestino. 

EEUU “apoya el derecho israelí a defenderse”

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, indicó ayer que “apoya totalmente el derecho israelí a defenderse”, pero evitó referirse a la cantidad inusitada de víctimas civiles que ha producido el bombardeo de su principal aliado internacional. “No hay país en la tierra que tolere que una lluvia de misiles caiga sobre sus ciudadanos desde fuera de sus fronteras”, dijo Obama sobre los cohetes arrojados por Hamas.

Ayer, dos edificios que alojaban a la prensa palestina e internacional fueron bombardeados, dejando a seis periodistas heridos, uno de ellos de gravedad. Medios de todo el mundo pidieron el cese al fuego israelí, pero no tuvieron eco en los principales gobiernos.