Se produjo una nueva erupción volcánica en Islandia y crece la actividad sísmica
Especialistas advirtieron de que la contaminación por gases podría ser arrastrada por el viento hacia el sur y el sureste. Por el momento, la lava no representa una amenaza directa para la población y la infraestructura.
Una nueva erupción volcánica en Islandia, la sexta desde diciembre, obligó a evacuar de nuevo la población de Grindavik, en el suroeste del país, según informó la Oficina Meteorológica local (IMO).
El fenómeno ocurrió en las últimas horas del día de jueves tras un fuerte terremoto y resultó en una fisura de aproximadamente 3,9 kilómetros de longitud.
En la madrugada de ayer, el organismo anunció en un mensaje en las redes sociales que se había abierto una segunda fisura al norte de la primera. Sin embargo, aseguraron que la actividad volcánica seguía concentrada en la primera fisura.
“La actividad sísmica es relativamente estable y la actividad principal es en la parte norte de la fisura. Por eso es improbable que la fisura se extienda al sur. No se puede excluir que la fisura se extienda al norte”, remarcaron.
A pesar de la magnitud del evento, las autoridades islandesas aseguran que los efectos de la erupción permanecen localizados y no representan una amenaza inmediata.
El jefe de policía de la región de Sudurnes, Ulfar Ludviksson, declaró a los medios islandeses que la evacuación del cercano pueblo pesquero de Grindavik se había realizado con éxito. Solo una veintena de casas del pueblo estaban ocupadas y la mayoría de los 4.000 habitantes habían sido evacuados en noviembre, antes de la erupción de diciembre.
La emisión de gases volcánicos en las cercanías es motivo de precaución, y los equipos de monitoreo mantienen una vigilancia constante de la actividad sísmica y volcánica. En tanto, tráfico aéreo de entrada y salida del aeropuerto de Keflavik no se vio afectado, según informó la oficina en su página web en la jornada de ayer.
Los equipos de protección civil permanecen en alerta máxima, preparados para responder ante cualquier eventualidad. Vale destacar que el país se encuentra sobre la dorsal mesoatlántica, una fisura en el fondo oceánico que separa las placas tectónicas euroasiática y norteamericana.