Siguen las acusaciones contra Gustavo Arribas
Avanzan las denuncias contra un hombre del círculo íntimo de Macri
Gustavo Arribas, titular de la AFI, fue acusado por Elisa Carrió, Graciela Ocaña y sectores del peronismo, debido a las transferencias que habría recibido por parte del dueño de la compañía Odebrecht, condenado por corrupción en una megacausa que investiga la Justicia brasileña. Preocupación en el entorno del Presidente
Una nueva causa de corrupción salpica al Presidente Mauricio Macri, en este caso a partir de que se conociera la noticia de que Gustavo Arribas, director general de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) y amigo personal del jefe de Estado, estaría involucrado en las coimas realizadas en el país por la empresa Odebrecht, investigada en Brasil por la causa denominada Lava Jato.
El funcionario nacional habría recibido una transferencia por casi 600.000 dólares por parte de Leonardo Meirelles, presidente de la empresa brasileña. La acusación fue recibida como un cimbronazo en el Gobierno nacional por la estrecha relación entre Macri y Arribas, la cual proviene de mediados de los 90, cuando el jefe de Estado era presidente del club Boca Juniors y el actual hombre de inteligencia se desempeñaba como representante de jugadores de fútbol.
La denuncia, que se inició periodísticamente, tuvo una continuación en la Justicia, primero a través de Elisa Carrió, quien volvió a a marcar las diferencias dentro de Cambiemos, y luego por la acusación de la legisladora porteña Graciela Ocaña, habitualmente alineada con el discurso oficial. También fue señalado por sectores del peronismo que también recurrieron al Poder Judicial para que se investigue el caso.
Fuego amigo
La investigación, que intentará ahora determinar por qué le giraron el dinero a Arribas, estará a cargo del juez Rodolfo Canicoba Corral. El magistrado se encuentra de vacaciones, por lo cual su juzgado es subrogado por Sergio Torres, quien ya citó a Carrió en Comodoro Py para que ratifique su denuncia.
La diputada de la Coalición Cívica había cuestionado a Arribas desde el mismo momento de su designación, considerando que no tenía la idoneidad para ocupar el cargo y ahora, en la presentación de su denuncia, afirmó que “esta información debe ser analizada por la Justicia de nuestro país”.
Por su parte, Graciela Ocaña también se presentó en la Justicia para ampliar su denuncia por el Lava Jato. Cuando se conoció que la empresa Odebrecht había realizado el pago de coimas en la Argentina, la funcionaria había pedido que se investigaran los supuestos sobornos a Manuel Vázquez, mano derecha de Ricardo Jaime.
En este caso requirió al juez federal Marcelo Martínez de Giorgi para que también investigue las operaciones vinculadas a Arribas y pidió que le prohíba la salida del país al funcionario, quien está de vacaciones en Brasil.
“Creemos que esto tiene que ver con la obra del soterramiento del tren Sarmiento. Siempre los pagos se realizan después de que se produce algún movimiento en la adjudicación de los contratos. Es muy llamativo”, afirmó Ocaña.
Nueva denuncia de la oposición
Diputados del peronismo informaron ayer que denunciaron penalmente a Gustavo Arribas para que se investiguen los depósitos por presuntas coimas pagadas por la constructora brasileña Odebretch “con algunos fundamentos mayores” que los planteados por Elisa Carrió en su presentación judicial. Legisladores del PJ indicaron que los 600.000 dólares aún estarían en la cuenta que Arribas tenía afuera, por lo cual “tendrá que dar explicaciones”.
Larreta y una insólita “defensa”
El jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, habló ayer sobre las denuncias contra el titular de la Agencia Federal de Inteligencia, Gustavo Arribas, y dijo: “Somos todos inocentes hasta que no se demuestre lo contrario”.
El mandatario evitó referirse al tema por la mañana y luego, visiblemente nervioso, cometió un furcio al recordar que en la Argentina se respeta el principio de presunción de inocencia: “En este país, somos todos inocentes hasta que no (sic) se demuestre lo contrario. Es el derecho constitucional que tenemos”, remarcó.
Larreta fue escueto al ser consultado sobre la situación de Arribas y prefirió destacar que el propio funcionario dijo que se ponía a disposición del Poder Judicial.
“Lo primero que hicieron él y el Presidente es ponerse a disposición. Son casos que la Justicia tiene que investigar”, consideró Larreta tras el papelón.
Para Garavano es un “tema menor”
El ministro de Justicia, Germán Garavano, sostuvo ayer que son “un cúmulo de insinuaciones” las que involucran al titular de la AFI con la denuncia de coimas por parte de la constructora brasileña.
El funcionario nacional dialogó con periodistas tras reunirse personalmente con el jefe de Estado, Mauricio Macri. En ese contexto señaló que “por ahora estamos simplemente ante un cúmulo de insinuaciones y frente a un hecho sobre el cual se ha brindado una explicación”, por lo cual concluyó que se trata de un “tema menor“.
Para Garavano, Arribas no debe ser apartado del cargo, aunque advirtió que, “después, según cómo evolucione la cuestión, se verá”. Y aclaró que “es una decisión del Presidente“.
“Seguramente Arribas aportará los elementos para brindar la explicación” que responda a la denuncia, consideró.
La falta de timing del Presidente
Luego de que se conociera la denuncia contra Arribas por presuntas coimas recibidas de parte de Leonardo Meirelles, Mauricio Macri se mostró en Córdoba con el gobernador Juan Schiaretti. Durante el encuentro inauguraron un gasoducto donde precisamente intervino la empresa Odebrecht. De hecho, en los cascos que poseían los obreros que se encontraban detrás de ambos mandatarios figuraba el nombre de la constructora brasileña.
El Presidente y el gobernador cordobés decidieron hacerse los distraídos y no mencionaron el nombre de la compañía en sus discursos. Asimismo, el jefe de Estado evitó referirse al tema tanto en la provincia mediterránea como en la inauguración de las obras anunciadas ayer en Capital Federal.