Bahía Blanca: el hundimiento del Frente Renovador en medio del río


En un año, el massismo pasó las de Caín. Por empezar, el intendente Gustavo Bevilacqua hace sólo un año pasaba del kirchnerismo al por entonces “equipo del futuro”, el que lidera Sergio Massa. Hace un mes, en el “filtro” de las elecciones primarias, la ciudad que gobierna el mismo massismo no tuvo en la compulsa electoral a Bevilacqua, porque apareció entre los diputados nacionales. El resultado fue malísimo: un tercer puesto de los votos totales (13,38%), cuya definición interna tuvo como vencedor al líder político y amigo del jefe comunal, Damaso Larraburu (presidente de la liga del Sur de Fútbol) por sobre el abogado Hernán González Becares.

Ayer, la poca resistencia del Frente Renovador bahiense terminó de ceder "en medio del río", o muy cerca de la orilla de las Generales. Sucedió que Larraburu renunció a la precandidatura y como un pez que por la boca muere habló mal del tigrense: "Mi relación con Massa era excelente hasta que ayer lo vi desbordado como un candidato presidencial”.

"La semana pasada nos comunicaron que no nos iban a ayudar, que no había mucha voluntad de ayudarnos y de trabajar con nosotros, razón por la cual nos pareció que era tiempo de seguir trabajando por la ciudad", confesó el histórico operador Larraburu, que cada vez tenía una imagen mas negativa en la ciudad portuaria.

A todo esto, Bevilacqua declaró que "quizás no estaba preparado para ocupar ese lugar (la intendencia a la que llegó en 2013), y ante los rumores de que Massa habría planeado liberar a los electores bahienses de la boleta municipal de su partido para octubre, parece ser que "Massa será quien decida al candidato a intendente" de este espacio (se barajan los nombres de Roberto Ércoli y del derrotado en las PASO, González Becares).