Berni, el caprichoso

Los caprichos son entendibles en chicos y hasta adolescentes, pero difícilmente puedan avalarse cuando se trata de adultos y, mucho peor, cuando el adulto en cuestión es funcionario pú­blico y está al frente de un ministerio.

Este es el caso de Sergio Berni, funcionario del gabinete de Axel Kicillof, apoyado por la vicepresidenta, al que muy poco le importa el alineamiento que la Provincia tiene en cuestiones de labor política con la Nación y, que en cada momento en el que puede, dispara con munición gruesa contra su par, Sabina Frederic.

Tras su exabrupto en Puente La Noria, en donde confrontó con efectivos de la Federal que hacían un retén, lo que le valió un reto por parte del gobernador, el titular del área de seguridad de la Provincia no se llamó a silencio, sino que expresó: “Lo volvería a hacer, por supuesto, no es la primera vez. Estamos en la calle y hay que resolver los problemas”.

Consultado en una entrevista televisiva sobre si le habrían pedido la renuncia, Berni indicó: “¿Por qué voy a renunciar? Tengo un compromiso con el gobernador que es inclaudicable hasta que el gobernador diga lo contrario”.