Carrió acusa a un juez platense de ocultar pruebas
La diputada de la CC-ARI arremetió duramente contra César Melazo por esconder evidencia clave ante el asesinato de los dos narcos colombianos en 2008, en el Unicenter de Martínez. La Justicia militante, en el centro del debate
La orden de detención que libró en los últimos días el juez platense Julio César Melazo contra el ahora prófugo exjefe de Hinchadas Unidas Argentinas (HUA), Marcelo Mallo, implicado en el doble crimen narco del Unicenter de Martínez en 2008, despertó fuerte polémica en el ámbito político y judicial por la tardanza y las incoherencias en el procedimiento.
Melazo fue el magistrado que en el pasado mes de enero había dejado en libertad a Mallo, cuando en un allanamiento por la triple fuga de los hermanos Martín y Cristian Lanatta y Víctor Schillaci, le encontraron una pistola Tanfoglio calibre 40 usada en el asesinato de dos narcos colombianos, que despertó sospechas sobre el verdadero accionar del letrado.
La diputada nacional por la CC-ARI, Elisa Carrió, quien desde hace años viene denunciando las connivencias entre la política y la Justicia con el poder narco, acusó al juez platense y al fiscal Mariano Sibuet -exsecretario de la procuradora general María del Carmen Falbo- de ocultar pruebas esenciales al fiscal interviniente en la causa del doble crimen, Luis Angelini.
Según Carrió, “el juez Cesar Melazo y el fiscal Mariano Sibuet, ambos en el grupo de Aníbal Fernández y María del Carmen Falbo, dejaron escapar a Marcelo Mallo. Ellos, con su inacción, ayudaron a que los responsables de crímenes relacionados al poder narco puedan escapar del peso de la ley”.
En ese sentido, la legisladora sostiene que “Melazo, adherente expreso, según su propio Twiter, de Aníbal Fernández y el Fiscal Sibuet, exsecretario de María del Carmen Falbo, no comunicaron este hecho al fiscal Luis Angelini a mediados de enero, por ese entonces a cargo de la investigación del homicidio de Unicenter”.
Encubrimiento
La pasividad llevó a que, según Carrió, el fiscal Angelini “se enterara por la Policía Científica de que el arma usada en el doble crimen fue hallada en casa de Mallo”, lo que motivó que el funcionario judicial instrumentara ante la jueza federal Sandra Arroyo Salgado por encubrimiento a Marcelo Mallo y Aníbal Fernández, por parte de Falbo, Sibuet y Melazo.
En diálogo con Hoy, una mano derecha de la chaqueña, el diputado nacional Fernando Sánchez, señaló que “cuando la doctora Carrió y la Coalición Cívica arremetíamos contra el poder narco y Aníbal Fernández, nadie nos quería escuchar, éramos una voz solitaria en el desierto. En el mundo de la Justicia hubo gente que tapó y ocultó siempre las pruebas que se habían presentado en contra de los jefes narcos en la Provincia de Buenos Aires”.
“La Justicia debe actuar si no quiere ser víctima del encubrimiento. Después de todo esto lo único que se puede comprobar es que Carrió tiene todos los patitos en fila. El narcotráfico maneja grandes sumas de dinero y con ello es evidente que ha comprado voces en la Justicia y en la política, que hoy día todavía los siguen defendiendo”, destacó Sánchez. De esta manera, el accionar de Melazo,
un magistrado que hasta el 10 de diciembre pasado apoyó abiertamente a Cristina Kirchner y respaldó la candidatura a gobernador del exjefe de Gabinete K, vuelve a quedar en el centro del debate, en este caso, por ocultar pruebas en un doble crimen narco cometido por sicarios, todavía sin resolver.
Falbo y La Morsa, en la mira
Desde las páginas del diario Hoy hace tiempo que se viene señalando la compleja trama de corrupción que contiene a personajes del mundo de la Justicia y la política con el poder narco.
El doble crimen del Unicenter de
Martínez puso en el ojo de la tormenta la labor llevada adelante por parte de la procuradora general de la Suprema Corte de Justicia bonaerense, María del Carmen Falbo, y del exjefe de Gabinete K, Aníbal “La Morsa” Fernández.
Siempre punzante en sus declaraciones, la legisladora de la CC-ARI, Elisa Carrió, sentenció que “María del Carmen Falbo es una de las responsables de dejar escapar a Marcelo Mallo. En todo lo que se refiere al doble crimen narco hay un encubrimiento fenomenal, recién siete años después se encuentra el arma usada en el asesinato en la casa de Mallo”.
“Mallo es un protegido de Aníbal
Fernández, y la relación que tienen Fernández con Falbo es histórica, por lo cual tendríamos que mirar para ese lado sobre el por qué no se actuó como se debería de haber actuado en la investigación”, resaltó la excandidata presidencial.
Pero Carrió no se quedó allí, sino que fue todavía más a lo hondo del relato, al aseverar que “Marcelo Mallo es el que proveía las armas para que Kirchner y Aníbal Fernández mataran a las personas que tenían que matar".
A su vez, la chaqueña volvió a sostener que la Morsa es el “autor intelectual” del crimen de General Rodríguez y recordó que el 18 de abril aportó pruebas en esa causa ante la jueza federal María Servini de Cubría, por la aparente vinculación de armas que tenía en su poder Mallo con ese caso.
En ese sentido, la titular de la Coalición Cívica remarcó que “parece que nadie en este país registra que hay una causa por autoría intelectual de Aníbal Fernández en el Triple Crimen que es investigada por la Justicia Federal”.
Relaciones peligrosas
Los vínculos del juez César Melazo con el poder político vienen de larga data. Su adhesión a la candidatura a gobernador de
Aníbal “La Morsa” Fernández, lo llevó a demostrar su simpatía por la red social Twitter, donde dijo sin empachos “compañero, lo felicito, cuente conmigo para lo que quiera” o “feliz cumpleaños, cumpa”.
La ayuda brindada a Mallo, puntero político anibalista en Quilmes, implicado en el asesinato del doble crimen narco de Unicenter en 2008, es un dato más para la diputada Elisa Carrió sobre los nexos entre el magistrado y el exjefe de Gabinete K.
Mallo ya había sido favorecido por Melazo en el mes de enero, cuando luego del allanamiento a su propiedad y de su detención, el magistrado dictaminara en forma instantánea su liberación.
En los pasillos de los Tribunales se lo suele conocer a Melazo como un juez militante, por su adhesión explícita a la expresidenta Cristina Kirchner. Además, muchos recuerdan sus tertulias con el exjefe de Gabinete de Daniel Scioli,
Alberto Pérez, y el exministro de Justicia de la Provincia, Ricardo Casal, mostrando de sobras sus contactos con la dirigencia bonaerense. Algunos memoriosos incluso sostienen que, antes de ser K, Melazo habría llegado a ser juez gracias al apoyo de sectores de “La Maldita” Policía en los ´90 y también llegó ser precandidato a diputado del partido que lideraba el exsubomisario Luis Abelardo Patti, condenado por crímenes de lesa humanidad.