CFK cubrió con impunidad a la denuncia de Nisman
La Cámara Federal, en fallo dividido, desestimó la acusación del fallecido exfiscal de la causa AMIA, en contra de Cristina Kirchner por encubrimiento. La medida podrá ser apelada. Si CFK se dice inocente, ¿por qué se opone a qué se investigue?
Cristina Kirchner se salió con la suya. Con sus influencias logró en un fallo dividido y polémico que la Cámara Federal desestimara ayer la denuncia del fiscal Alberto Nisman contra ella por supuesto encubrimiento en la causa por el atentado a la AMIA. De esta manera cubre con una manto de impunidad la acusación ya que así no permitirá que la Justicia desarrolle la investigación para probar o no culpabiliad de la Jefa de Estado y sus leales funcionarios.
Los jueces de la Sala I, Eduardo Freiler, Jorge Ballestero y Eduardo Farah, un tribunal que dictó varios fallos favorables para el gobierno nacional, decidieron rechazar la denuncia por "inexistencia de delito".
Tras dos horas de deliberaciones, los tres magistrados votaron, y Freiler y Ballestero ratificaron la decisión del juez Daniel Rafecas, que había desestimado la presentación judicial de Nisman, mientras que Farah se manifestó en contra.
En este escenario, el fiscal de Cámara, Germán Moldes (tiene 10 días), podría apelar el fallo. En ese caso, serían los jueces de Casación, en una sala por definir por sorteo, los que analizarían nuevamente la situación.
La Presidenta habló ayer en cadena nacional de varios asuntos, pero nada dijo respecto a la resolución judicial que la benefició.
Complot para desincriminar a iraníes
Nisman denunció a la Presidenta, al canciller Héctor Timerman, al diputado de La Cámpora Andrés Larroque, al piquetero Luis D'Elía y al líder de Quebracho, Fernando Esteche, entre otros implicados, porque supuestamente habían tramado un complot para desincriminar a ex funcionarios iraníes de los cargos que pesan en su contra por idear y ejecutar el atentado contra la AMIA en 1994.
El de ayer fue el segundo revés judicial que recibe la acusación contra la Presidenta por encubrimiento, tras el fallo del juez Rafecas, quien argumentó que en la denuncia no había elementos para sostener la comisión de un delito, luego de analizar la denuncia, el requerimiento del fiscal Gerardo Pollicita y de los documentos que aportó el Gobierno al caso posteriormente, como un escrito de la procuradora del Tesoro, Angelina Abbona, y otros escritos de Nisman.
El fiscal Pollicita impulsó el caso y pidió realizar medio centenar de medidas de prueba para avanzar y establecer si la denuncia era verosímil. Pero Rafecas, tras estudiar el expediente una semana, entendió que no había evidencias para sostener la denuncia. Y dos días antes de que Cristina Kirchner inaugurara ante la Asamblea Legislativa el período ordinario de sesiones en el Congreso, desestimó la denuncia.
Pollicita apeló el desistimiento para que la Cámara Federal revisara el fallo de Rafecas. Quién defendió la denuncia de Nisman ante ese tribunal es Germán Moldes, el fiscal ante la Cámara Federal. Ayer, el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, le propuso a Moldes reforzar la custodia que le asignaron. ¿Habrá sido una forma de amedrentarlo?
Los argumentos del juez Farah
El juez de la Sala I de la Cámara Federal Eduardo Farah votó en soledad a favor de investigar la denuncia del fiscal Alberto Nisman contra la presidenta Cristina Fernández por presunto encubrimiento en la causa AMIA.
A contrapelo de sus colegas Jorge Ballestero y Eduardo Freiler, Farah se dedicó desde la página 52 hasta la 76 del fallo de 77 fojas a justificar por qué debía dejar abierta la causa contra la jefa del Estado y reclamar el apartamiento del juez Daniel Rafecas de esa causa, al considerar que su decisión de cerrar el caso era "arbitraria" y "apresurada".
En su voto, Farah insistió en que la instrucción es la que debe "comprobar si existe un hecho delictuoso mediante las diligencias conducentes al descubrimiento de la verdad" y remarcó que "en esa dirección, la etapa preparatoria, por definición, no sirve sólo para corroborar la hipótesis criminal, sino también para descartarla".
E hizo alusión a manuales del ex juez de la Corte Eugenio Zaffaroni, donde se remarcaba que "es difícil distinguir dónde radica la diferencia entre un acto preparatorio de un hecho (situación que no es punible) de su comienzo de ejecución (que sí es punible)".
Pero en ese contexto Farah se quejó porque "al haberse desestimado la posibilidad de abrir la investigación sin dar curso a las pruebas requeridas por el fiscal, no es posible esclarecer si, como alegó esa parte, existió una intención -por razones de alineamiento político o ideológico o por razones de conveniencia comercial, o por otros intereses no conocidos aún pero que la investigación podrá develar- de encubrir a los presuntos autores del atentado a la AMIA".
El juez entonces hizo hincapié en las decenas de medidas de prueba que solicitó el fiscal Gerardo Pollicita y remarcó: "Ninguna de esas pruebas se produjo, porque el juez les restó relevancia a la hora de desestimar el caso".
“Al menos sabemos los nombres de los jueces que sepultaron su trabajo”
La diputada Laura Alonso fue la primera en pronunciarse en contra del fallo de la Cámara Federal. A minutos de que se conociera la decisión del tribunal, recordó por Twitter que el titular de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, había dicho en la apertura del año judicial que era "tiempo de terminar con la impunidad". Al respecto, acotó: "Si a la Corte le preocupa que la gente confíe en la Justicia, este fallo no ayuda nada".
Su par Patricia Bullrich usó el mismo medio para opinar sobre el fallo. "¿Murió Nisman y ahora la causa? ¿La nueva Unidad AMIA desestimará la investigación sobre los iraníes?”. Entonces aseguró que "solo de la mano de una justicia sin interferencias llegará la verdad y la justicia y se terminará la impunidad".
“Aún no sabemos quién mató a Nisman pero sí sabemos los nombres de los jueces que sepultaron su trabajo desestimando su denuncia”, indicó Sergio Bergman.