Cristina mueve primero
El anuncio de CFK como candidata en la Tercera Sección reordena el tablero peronista. Llamado a Kicillof, cautela en el massismo y definiciones pendientes frente al avance libertario.
La decisión de Cristina Fernández de Kirchner de competir como diputada provincial por la Tercera Sección Electoral no solo sacudió la interna de Unión por la Patria: abrió un proceso de reorganización forzado en el peronismo bonaerense. Con su candidatura ya lanzada, la expresidenta buscará, según su entorno, acelerar la unidad de cara a las elecciones legislativas de septiembre. Para eso, el primer paso será un llamado a Axel Kicillof, con quien no tiene contacto directo desde el año pasado.
La intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, anticipó ese contacto y negó tensiones: “Cristina no tiene problema en llamarlo, lo hará hoy”, dijo en el día de ayer. Sin embargo, en la Gobernación tomaron nota del anuncio por los medios, lo que alimentó ciertos resquemores.
Desde el Movimiento Derecho al Futuro, el espacio de Kicillof, algunos interpretan que la jugada de CFK fue más que un gesto de unidad: la ven como una forma de marcar territorio en el distrito más fuerte del peronismo, sin exponerse en zonas más competitivas como la Primera o la Octava sección.
A pesar del malestar, en el entorno del gobernador insisten en que hay voluntad de diálogo. “Axel está dispuesto a sentarse con quien sea necesario para definir una estrategia común”, aseguran. Sin embargo, los puntos de tensión siguen latentes: el desdoblamiento de las elecciones, criticado abiertamente por CFK, es uno de ellos.
La exmandataria defendió su candidatura con un argumento que expone la urgencia electoral: “¿Alguien cree que si al peronismo le va mal en septiembre, le va a ir bien en octubre?”. En ese marco, la unidad ya no aparece como una opción deseable, sino como una necesidad vital frente a La Libertad Avanza.
Del lado del massismo, la cautela es la regla. Alexis Guerrera, uno de los voceros de confianza de Sergio Massa, afirmó que el exministro “va a estar donde el peronismo necesite”, sin confirmar alineamientos concretos. Massa convocará a su tropa para definir si se suma a una mesa común o impulsa una alternativa propia, algo que hasta ahora nunca descartó.
Con CFK en el centro del escenario, el peronismo vuelve a discutir liderazgo, estrategia y candidaturas. Lo que está en juego, repiten todos, es frenar a Javier Milei. Para eso, Cristina ya movió su ficha. Ahora todos miran a Axel.