¿El que apuesta al dólar pierde?
El peso vale cada vez menos y se teme que la devaluación se profundice luego de las elecciones. La revalorización del dólar respecto al real brasileño también mete presión
"El que apuesta al dólar pierde” es una de las frases más famosas de la historia económica reciente de nuestro país. Fue pronunciada, por primera vez, en el año 1981 y salió de la boca del entonces ministro de Economía de la dictadura, Lorenzo Sigaut, para intentar frenar las expectativas devaluacionistas.
Obviamente, lo único que hizo Sigaut con su desafortunada frase fue echar más leña al fuego. Y así fue como, pocos días más tarde, no le quedó otra alternativa que disponer una devaluación del dólar en un 30%, la primera de una serie de devaluaciones de la moneda nacional que tomó durante su breve gestión. Además, el entonces titular del Palacio de Hacienda desdobló el mercado cambiario, mediante la creación de un “dólar financiero” libre y un “dólar comercial” regulado, con diferentes valores. Cualquier similitud con la actualidad, donde existe una cotización regulada inaccesible para gran parte de la ciudadanía, y distintas cotizaciones en el mercado informal, no es una mera coincidencia.
El peso se ha convertido en la moneda de menos valor del continente, por obra y gracias de la administración kirchnerista que, tras una década en la Casa Rosada, dejó al país con una economía estancada, un sistema productivo reducido a su mínima expresión, una inflación galopante y una acelerada caída de los índices de empleo genuinos. Pero, lamentablemente, todo indica que aún no hemos tocado piso.
La devaluación del real, que se produjo en las últimas semanas, está generando un profundo daño en la competitividad de los pocos sectores productivos que aún exportan en nuestro país, y que generan divisas. Naturalmente, la revalorización del dólar en el vecino país le mete presión al peso y profundiza aun mas los trastornos en la economía doméstica generados por los constantes errores y horrores de las medidas impulsadas por el kirchnerismo (ver página 4).
El dólar blue-blue, que se compa y vende en las cuevas, superó el viernes pasado los $9,20, y la cotización oficial también se viene devaluando a cuenta gotas. La situación podría profundizarse luego de las elecciones de octubre.
En diálogo con Hoy, el economista Alieto Guadagni, exministro de Economía bonaerense, aseguró que el futuro del dólar depende básicamente de los siguientes factores:
1- Ritmo de expansión mensual de la masa monetaria, si continúa creciendo a más del 30 por ciento anual como hasta ahora presionara al alza tanto al dólar legal como al ilegal.
2- Ritmo de evolución de las restricciones a la adquisición legal de divisas para operaciones de pagos al exterior (importaciones, pago de servicios y remesas de dividendos), mientras mayores sean las restricciones mayor será la brecha entre el dólar legal como el ilegal.
3- Mientras sigan aumentando algunas importaciones críticas de energía (fuel oil, gas natural y gas licuado), ello tenderá a presionar al alza al dólar legal.
“Finalmente, se abrirá el debate en el seno del gobierno sobre el desdoblamiento o no del mercado cambiario, entre un dólar para ‘bienes’ y otro dólar ‘financiero’. En cualquier caso la tendencia estructural será a la suba del tipo de cambio, empujado al alza por el aumento del gasto público que desbordará cualquier opción posible de política económica, en una administración incapaz de diseñar una sensata política fiscal”, explicó Guadagni. Y concluyó: “No hay expectativas que la política económica comience a ser razonable, como lo fue hasta fines del 2005.cuando pudo controlar eficazmente la inflación”.
“Hay margen para que siga subiendo”
En diálogo con Hoy, el economista Juan Dumas, exdirector de Comercio Interior de la Nación y ex subsecretario de Comercio Exterior, sostuvo que “hay algunos indicadores que hay que tener en cuenta en este segundo semestre como son la fuerte emisión monetaria y la impresión de los precios que repercute en la mayoría de la gente”.
“Seguramente va a haber una mayor valorización del dólar, esa es la tendencia con altibajos. Va a haber un dólar marginal a un valor creciente ya que el precio de 9 pesos no es alto en términos reales y hay mucho margen para que suba más. En caso de que haya inestabilidad política esa tendencia va a ser mucho mayor”, sostuvo el economista
En ese sentido, el exsecretario de Hacienda consideró que “todo va a depender de lo que haga el gobierno después del 27 de octubre. Si el gobierno resuelve adoptar una política económica creíble podrá controlar la devaluación del peso y la suba del dólar, pero si sigue esta política desordenada y con el cepo cambiario va a tender a subir más”.
La devaluación del peso ya es las más pronunciada en 10 años
La devaluación anual del peso argentino en lo que va de 2013 ya es la más alta de los últimos diez años. La cotización del último viernes, cuando el tipo de cambio oficial cerró el jueves a $5,62, marcó una suba de 14% entre enero y agosto. Y no son pocos los economistas que ven que este camino podría profundizarse abruptamente después de las elecciones, tal como sucedió en Venezuela a principios de año.
Se trata de una cifra a dos centavos de distancia del récord de 14,4% del año pasado. Desde mayo pasado, el Banco Central de la República Argentina aceleró la tasa de devaluación del peso a un ritmo promedio de 1,8% mensual. De hecho, en julio pasado se registró la mayor suba mensual del tipo de cambio en los últimos cuatro años, cuando la divisa estadounidense se pactó en los bancos a $5,515.
