El salario real privado es el más bajo en casi 20 años

Los principales análisis de economistas, heterodóxos y ortodóxos, coinciden en que el ancla salarial es una de las estrategias de Javier Milei para desacelerar la inflación. Tan es así que los salarios reales de los trabajadores formales del sector privado, que suelen ser los más estables de la economía argentina, descendieron desde la asunción del nuevo Gobierno nacional y marcaron un mínimo histórico en comparación con las últimas dos décadas.

De acuerdo a los datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), publicados recientemente por la Secretaría de Trabajo de la Nación, la remuneración promedio de las personas con empleo asalariado registrado en el sector privado presentó una caída del 2,6% mensual en agosto en términos reales (si se tiene en cuenta la inflación). De esta manera, frenaron un proceso parcial de recuperación de cuatro meses.

Respecto a noviembre del 2023, previo a que Javier Milei asumiera como presidente, los salarios formales del sector privado perdieron 2,1% frente a la inflación.

Asimismo, se encuentran un 7,8% por debajo del máximo registrado por la gestión de Alberto Fernández (julio de 2023), un 15,7% detrás del máximo registrado durante la presidencia de Mauricio Macri (agosto de 2017), y a un 20,1% del récord de Cristina Fernández de Kirchner, marcado en septiembre de 2015 cuando el salario mínimo medido en dólares en Argentina era el más alto de América del Sur. En consecuencia, el nivel actual de los sueldos es uno de los más bajos de los últimos 20 años.

Los datos anteriormente mencionados dejan afuera a los sectores más golpeados por las políticas económicas del actual gobierno. El caso más gráfico es el de los empleados del sector público, cuyos salarios registraron en agosto una pérdida en términos reales del 16,5% en comparación con el nivel de noviembre del año pasado, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec). Por otro lado, algunos análisis estiman que los ingresos de los trabajadores informales se redujeron alrededor del 20% en términos reales durante los primeros meses del mandato libertario, aunque en este caso se trata de un sector que no está registrado y, por lo tanto, sus mediciones no son exactas.