“Hay que acompañar las obras con los cultivos adecuados en la Provincia”

Así lo afirmó Leonardo Sarquís, ministro de Agroindustria bonaerense, durante una visita a la redacción del diario Hoy, donde habló sobre el impacto de las inundaciones en Buenos Aires y desligó la sojización de la problemática

En una entrevista exclusiva con este medio, el ministro de Agroindustria bonaerense, Leonardo Sarquís, hizo un balance de su gestión y habló sobre las políticas implementadas frente a la inundación sufrida en la Provincia, entre otros temas. 

—A dos años de su gestión, ¿qué balance hace?

—Netamente positivo. Este es un ministerio que merecía un protagonismo distinto y en estos dos años se lo dimos. El objetivo que le planteé a la gobernadora cuando asumimos fue hacer todo lo posible para mejorar la agroindustria bonaerense y posicionarla como la más importante del país. Estamos impulsando todo para que eso pase. Pero esto no se hace con una acción solamente del Ministerio, sino que hay que trabajar en conjunto “las 3P”: la participación público privada. 

—Hace varios meses que muchos municipios de la Provincia están atravesando grandes inundaciones, ¿qué política han tenido para acompañarlos? 

—Nosotros desde el principio estuvimos presentes. Lo que ha pasado con las inundaciones es algo muy raro, producto del cambio climático. La Provincia de Buenos Aires no estaba preparada para recibir tanta agua. No­sotros reaccionamos rápidamente trabajando en conjunto con los municipios, a través de un comité de crisis y de un comité de riesgo, en el que están actuando muchos municipios sin entorpecernos. Siendo preventivos, en la parte agroindustrial hemos actuado muy rápido a través de créditos y líneas de financiamiento para emergencia. Y, fundamentalmente, dando la cara.

—¿Cree que la sojización tiene implicancias en las inundaciones?, ¿cómo puede resolver ese problema?

—No. El 97% de la soja del país se hace en siembra directa. Me parece que echarle la culpa a un cultivo es una falacia. El Gobierno nacional y el provincial, con recursos propios, están haciendo las obras que faltaban para prevenir, por lo menos, para minimizar las inundaciones. A su vez, nosotros tenemos que trabajar con los modelos productivos, es decir, acompañar las obras con los cultivos adecuados en la Provincia. El exceso de soja no ha provocado ese problema, sino la falta de obra. Son importantes las canalizaciones, con el buen ordenamiento del agua, lo que se llama “gobernanza del agua”, que quiere decir cómo la utilizo, la ordeno, la dirijo. Esos beneficios nos van a llevar a que la Provincia en cinco años minimice el problema de las inundaciones a un 70% u 80%, y recupere 1.800.000 hectáreas improductivas.

—¿Qué sucede con los granos y cereales en la Provincia?

—Una de las cosas buenas que hemos hecho en estos dos años es aumentar considerablemente la producción de tipos de maíz y de trigo, que son gramilla y cereales, que ayudan a la rotación de cultivo. 

Lo que debería pasar en Buenos Aires es que no aumente la producción de soja, sino que se mantenga como está. Lo importante es que se incrementen los cereales, el maíz, el trigo, que ayudan a la rotación de cultivo, así lo que se logra es que el suelo tenga las particularidades y los beneficios que tiene que tener a través de una buena rotación. Fertilizás y los cultivos pueden aprovechar bien los nutrientes. 

—¿Qué mirada tiene en relación con la intervención del Estado en lo que se refiere a exportación de cereales?

—El Estado siempre tiene que intervenir, no tiene que entorpecer. Tiene que marcar la cancha dejando que todos jueguen, siempre con reglas claras. Muchas veces a algunos sectores no les gustan esas reglas, como por ejemplo al sector privado. Lo importante es que el Estado siempre tiene que tener una visión de control, pensando en favorecer.

—¿Cómo influye en su gestión su experiencia como gerente de Semillas en Monsanto?

—Lo primero que digo es que cuando uno tiene la posibilidad de trabajar en una empresa, me parece que es una oportunidad bárbara después poder volcarlo como herramienta al sector público.

Con respecto a la contaminación de los productos que hace esa empresa u otra, me parece que en Buenos Aires y en toda la Argentina la discusión termina siendo que nos concentramos en la parte chica. Hablamos de un producto y no de la buena práctica. Todos los productos químicos pueden contaminar en alguna parte, pero si esos productos se aplican bien, no va a haber ningún problema.

“Tenemos cuatro objetivos generales”

El ministro de Agroindustria de la Provincia aseguró que ya ha conversado con la gobernadora María Eugenia Vidal sobre cuatro objetivos generales para lo que es la gestión 2018-2019: “Uno es la innovación, que tiene que ver con todo el trabajo de la Bioeconomía y Biotecnología. El segundo es la competitividad y productividad, es decir, cómo hacemos con nuestras herramientas para ayudar a toda la cadena agroindustrial y darle una oportunidad para que sea más competitiva y productiva. El tercer objetivo es la seguridad agroalimentaria y la utilización de procesos que sirvan para eso, cómo hacemos para que nuestros alimentos en la Provincia, los que damos de acá hacia el mundo, tengan los controles necesarios”.

Además, Sarquís agregó: “El cuarto es una agroindustria con foco social, cómo ir cada vez mirando más a los pequeños productores para que tengan beneficios y logren pensar que esta actividad es la mejor y la más importante, que le va a dar un movimiento tanto a la Provincia de Buenos Aires como al país”. Por último, señaló que “el país puede producir alimentos para 600 millones de personas y Buenos Aires puede hacerlo para 300 millones, porque somos el 50% de la agroindustria del país. Pensemos cómo ayudamos nosotros a que la pobreza sea cada vez menor, a que el hambre se vaya conduciendo a cero”.