Larreta, en “modo campaña”, insistió con la antigrieta y tuvo gestos políticos con Macri
Horacio Rodríguez Larreta dejó inaugurado ayer su último período de sesiones en la Legislatura como jefe de Gobierno porteño.
El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, dejó inaugurado ayer su último período de sesiones en la Legislatura como jefe de Gobierno porteño con un discurso en el que ratificó su mensaje antigrieta, cuestionó a los sectores más duros del PRO al advertir que “el cambio no es gritar”, y reivindicó los 16 años de gestión local con un gesto a su antecesor y expresidente, Mauricio Macri.
Un dato llamativo tuvo que ver con elogios para con el exmandatario al agradecer la gestión en la Ciudad en la cual comenzaron “las transformaciones” en el distrito, pero también reconoció el rol durante su mandato en la Casa Rosada al sostener que, de llegar a ser electo como presidente, retomará “el camino empezado en 2015, que es clave para un desarrollo federal de la Argentina”.
Y destinó un extenso capítulo a las políticas en materia de seguridad durante el cual remarcó la conformación de la Policía de la Ciudad y reclamó también por el uso de las pistolas Taser para que los agentes de la Policía de la Ciudad “tengan más herramientas en situaciones de mucha concentración de gente”.
“Larreta es mafia”
Legisladores de la oposición porteña cuestionaron el “discurso de campaña” de Horacio Rodríguez Larreta en el Parlamento local y criticaron la situación del ministro de Seguridad, Marcelo D’Alessandro, quien pidió licencia tras la filtración de supuestos chats con jueces, empresarios y allegados a miembros de la Corte Suprema que tenían contratos de concesiones con el Estado.
“Nos dejan una ciudad sin un modelo de desarrollo productivo que acompañe el esfuerzo de pymes y comercios”, expresaron, y remarcaron que “hace 57 días que estamos sin ministro por la escandalosa licencia de D’Alessandro, lo que compromete seriamente la seguridad de todos los porteños y las porteñas, tal como hemos visto en las últimas semanas”.
Alejandrina Barry, del PTS en el Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), planteó que “la grieta que tiene Larreta es con la verdad”, ya que, según analizó, “habla de la construcción de 100 escuelas que nadie conoce, dice que amplían la jornada de estudios cuando quitan horas para mandar a los pibes a trabajar en Rappi y habla del subte cuando no están construyendo ni un kilómetro”.