Las mentiras de la electrificación del Roca

Ante la falta de obras, desde el gobierno se piensa en usar viejas locomotoras diesel sustentadas por un vagón energético para recorrer el trayecto La Plata-Constitución. Los problemas eléctricos en la construcción. Los disparates ferroviarios de Guillermo Dietrich

Las obras de la electrificación del Ferrocarril Roca en su tramo Constitución-La Plata, que hoy funciona solo de la Capital Federal a Quilmes, se encuentran paradas. Lo que fuera uno de los proyectos emblemas de la falsa revolución ferroviaria K, continúa sumido en la más absoluta desidia y desatención en el gobierno de Mauricio Macri.

Si bien las vías ya fueron reemplazadas en su totalidad, el tendido de cables está puesto solo hasta Hudson, mientras que a nuestra ciudad llegan solo los postes, faltando los cables de tendido eléctrico, los puentes pasantes y un sistema de comunicaciones obsoleto que sigue sin renovarse.

Sin soluciones a la vista y con tareas paralizadas, desde el ministerio de Transporte que conduce Guillermo Dietrich, se está pensando en usar viejas locomotoras diesel sustentadas por un vagón energético para recorrer el trayecto La Plata-Berazategui, para luego hacer trasbordo hasta Constitución, medida que los ferroviarios catalogan de “disparatada”.

Retroceso extremo

La idea que ronda por las mentes de los funcionarios nacionales es cuestionada por diversos sectores, por entender que la misma “no tiene pies ni cabeza”, y lo que hará será costarle al Estado cifras millonarias que se podrían usar para la electrificación del ramal.

En diálogo con Hoy, el Presidente de la Comisión Nacional Salvemos al Tren (CNST), Norberto Rosendo, señaló que “lo del vagón energético detrás es un disparate total. Todos los trenes comprados a China, tienen un vagón usina, entonces algún imaginativo cercano a Dietrich dijo que como había un vagón usina podían usar esas usinas para hacer funcionar los trenes eléctricos, lo que es una locura que no cabe en ninguna cabeza medianamente sana”.

Para el Ingeniero Ferroviario, “los vagones usina son para los servicios del tren, llámese aire acondicionado o calefacción, no para traccionar el tren. Lo que va a venir van a ser los trenes traccionados con locomotoras y con un vagón energético, se hará de igual manera que lo hacía el Rápido, que tenían atrás o adelante un vagón usina, que eran para la comodidad y las luces”.

“Lo de Dietrich es una mentira, ya que se paró la obra de electrificación del Roca porque cortaron el flujo de plata. La pregunta del millón es: ¿por qué cortaron el flujo de plata para la obra cuando esta era financiada con un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID)?”, destacó Rosendo.

Problema energético

A todo esto se le suma la dificultad energética, que al no haberse construido como se había prometido en su momento una Subestación en Berazategui, toda la electrificación del Roca depende de la Subestación de Temperley, que aguanta hasta 20 kilovatios, cuando el recorrido que une la capital provincial con la nacional, necesitaría de 25 kilovatios como mínimo.

La inestabilidad que genera la Subestación Temperley, hace que el riesgo de poner en funcionamiento este tendido eléctrico sea muy grande, ya que ante cualquier cortocircuito se corta todo, entonces lo que se debe hacer es dividirla en dos, con una subestación en las tierras de Juan Patricio Mussi, que tampoco se hizo.

La complicación radica en que como esta obra requeriría meses de trabajo, la sociedad no soportaría más demoras en la paralización del servicio, costo político que el gobierno no estaría dispuesto a pagar, lo que lleva a que proyectos alocados e irrealizables ronden por las cabezas de los funcionarios.