López prometió “prender el ventilador”
Cuando esté en mejores condiciones físicas y anímicas, el exsecretario de Obras Públicas del kirchnerismo, José López, “va a dar más información” sobre el origen de los casi nueve millones de dólares con los que fue sorprendido el pasado 14 de junio, cuando intentó esconder el dinero en un convento de General Rodríguez.
Así lo reveló ayer el juez federal Daniel Rafecas, luego de ampliar el procesamiento del exfuncionario por la mansión donde vivía en Dique Luján, en el Tigre.
Sobre esa propiedad, el magistrado puntualizó que “hay una serie de elementos de prueba que dan la pauta de que, desde 2009, López se manejó como dueño de la casa, más allá de que la titularidad estuviera a nombre de dos empresarios y él figurara como inquilino”.
Rafecas también minimizó la posibilidad de que las monjas del convento del partido bonaerense de General Rodríguez estuvieran en conocimiento del hecho y fueran cómplices.
En tanto, el jueves, Rafecas procesó a la esposa de López y dos allegados al matrimonio, sospechados de ser testaferros. Sobre esa resolución, sostuvo que “es un procesamiento con vistas a que el día de mañana se haga un juicio oral en el que las partes puedan tener la posibilidad de presentar sus alegatos”.
Sobre la titularidad de la casa de Tigre, reiteró que le están “atribuyendo a López la propiedad, valuada en 700.000 dólares”, por lo que concluyó que la figura de inquilino “es solamente aparente”.