“Los cooperativistas reciben salarios de miseria e indigencia, y los trabajadores municipales, sueldos que no les permiten alcanzar una canasta básica”
Lo aseguró el titular del Sindicato de Obreros y Empleados Municipales de La Plata, Gustavo Hernández.
El desvío de más de 2.000 millones de pesos y los salarios de indigencia en la gestión del intendente Julio Garro son considerados por el titular del Sindicato de Obreros y Empleados Municipales de La Plata, Gustavo Hernández, como una “estafa millonaria con sueldos de hambre en la comuna”.
Desde el gremio indicaron que “en estos últimos días se ha visto a más trabajadores de cooperativas en las calles de la ciudad a raíz de las denuncias por corrupción que envuelven al Ejecutivo platense” y remarcaron que “el intendente intenta tapar el sol con las manos debido a una inmensa caja negra, de millonarias sumas de dinero que se han desviado y administrado de manera fraudulenta, en la que hay registrados 5.000 trabajadores, pero solo una mínima parte recibe un mísero sueldo”.
También señalaron que “desde 2018 se vienen realizando denuncias por el desvío y la forma, para nada transparente, de administración de fondos públicos que lleva a cabo la administración de Julio Garro”, tras salir a la luz que las cooperativas utilizadas estaban suspendidas por el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes). Pero parece ser que nada de esto importa a los funcionarios y allegados a Garro que están al frente de las mismas y siguen facturando millones de pesos todos los meses al municipio.
“Mientras los cooperativistas reciben salarios de miseria e indigencia, y los trabajadores municipales, sueldos que no les permiten alcanzar una canasta básica, el intendente de Cambiemos no puede justificar, ante los reclamos de la oposición, desvíos por más de 1.200.000 pesos mensuales para una sola cooperativa”, añadió el titular del gremio.
Hernández afirmó que “esto no solo ocurre con el manejo de las cooperativas, sino también con los trabajadores municipales. De acuerdo a la ley 14.656, que regula el empleo municipal en toda la Provincia de Buenos Aires, está prohibida la contratación a destajo, algo que es moneda corriente en la Municipalidad de La Plata y que, debido a la precariedad que implica, les permite contratar y despedir trabajadores de manera arbitraria y con sueldos de hambre”.
Hernández declaró que desde enero vienen reclamando por diferentes vías que los trabajadores que están en situación de precariedad sean registrados y tengan los mismos derechos que un trabajador de planta mensualizada o permanente. “El municipio tenía tiempo hasta el mes de marzo para registrar los contratos ante el Ministerio de Trabajo de la Provincia, pero nada de esto ocurrió”, indicó a este multimedio, y agregó: “No solo que no fueron registrados los contratos, sino que, por el contrario, muchos trabajadores fueron despedidos sin justificación alguna durante los primeros meses del año, y también luego de haberse decretado el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio debido a la pandemia de Covid-19, desobedeciendo al propio Presidente Alberto Fernández, quien calificó de miserable a todo aquel que haya despedido trabajadores durante la pandemia”.
Además, Hernández indicó que “en el municipio platense conviven trabajadores con sueldos precarios de entre 13.000 y 18.000 pesos, cooperativistas y destajistas con salarios miserables (entre 4.000 y 10.000 pesos), que distan abismalmente de referenciarse en un salario mínimo vital y móvil, y ni que hablar de que un trabajador municipal pueda acceder a una canasta básica, que asciende a 47.216 pesos, de acuerdo a los índices publicados por el Indec”.
“Sabemos que hay alrededor de 5.000 cooperativistas, de los cuales cobran cerca de 800, y que a su vez no se les paga lo que corresponde. Asimismo, ocurre que no tienen representación por parte de ningún gremio. En reiteradas oportunidades hemos recibido denuncias de quienes trabajan en las cooperativas por causas de maltrato, descuentos abusivos, y hemos acompañado los reclamos que han realizado desde el sector solicitando la regulación y la incorporación a la planta laboral, ya que realizan la misma tarea y en muchos casos reemplazan el trabajo que debería hacer un empleado municipal”, remarcó Hernández.
En relación a la posibilidad de pelear por los derechos de los cooperativistas, el secretario general del Soemlp afirmó que, si bien no pueden representarlos, siempre han estado presentes en los reclamos, “a diferencia de lo que sucede con el gremio oficialista, que hace la vista gorda y no interviene porque debe ver afectados sus intereses, al ser parte de este entramado de corrupción”.
“Todo este manejo oscuro pareciera ser un secreto a voces, pero quienes somos parte de la cosa municipal sabemos con claridad que es algo que existe y que es llevado a cabo por funcionarios a quienes solo les importa llenarse sus bolsillos, y que responden directamente al secretario de Coordinación, Oscar Negrelli, fiel reflejo de los intereses espurios del intendente Julio Garro”, concluyó Hernández.