Más renuncias en el gabinete de Milei y el cierre del área destinada a prevenir la violencia de género

Siguen los cambios en el gabinete de Javier Milei: el secretario de Innovación, Ciencia y Tecnología, Alejandro Cosentino, presentó su renuncia en las últimas horas.

La salida del cargo se da luego de que su referente en la Casa Rosada, Nicolás Posse, fuese eyectado del cargo de jefe de Gabinete. Ahora, Cosentino podría asumir otro rol de la mano de Federico Sturzenegger, al tiempo que no descartan más cambios en la Jefatura.

El área de Ciencia está bajo la estructura de la Jefatura de Gabinete que conduce ahora Guillermo Francos. Su paso al costado se da en medio de la fuerte crisis de financiamiento que atraviesa el sector.

Según datos del Centro Iberoamericano de Investigación, Ciencia e Innovación (Ciicti), la ejecución presupuestaria para la función de Ciencia y Tecnología cayó un 20,9 % interanual en el primer cuatrimestre del año. La proyección es que, para diciembre, el desplome se puede posicionar entre el 25 % y el 30 %.

El informe advierte que “la inversión pública constituye el principal componente y el driver fundamental de la I+D” por lo que esto supone “un impacto demoledor sobre el sistema como un todo”.

Desjerarquización, desfinanciamiento y cierre

Después de dejar reducido a una Subsecretaría, solo destinada a prevenir las violencias contra las mujeres a lo que era el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad, el Gobierno de Javier Milei resolvió disolver el área.

La decisión le fue comunicada a la subsecretaria Claudia Barcia por el secretario de Derechos Humanos, Alberto Baños, a través de un mensaje de Whatsapp en la noche del miércoles. Barcia presentó, horas después, su renuncia indeclinable.

La desaparición completa del organismo, que tiene su antecedente en la creación del Consejo Nacional de las Mujeres, en 1992, incluye despidos de más del 80 % de la planta de trabaja­doras.

“No creo que queden más de 60 personas”, sostuvo una persona que forma parte de los equipos desde 2012. Con esa reducción no es posible que continúen en funcionamiento ninguno de los dispositivos de acompañamiento y protección a las víctimas de violencia de género. La línea 144 forma parte de esos programas, por ejemplo.