Cuenta regresiva para el cuestionado juez platense
Melazo, “al horno”: se decide su suerte en el jury
Estaría todo dado para que el próximo martes el cuestionado juez platense sea apartado en forma preventiva de su cargo. Serían “contundentes” las pruebas recolectadas en contra del magistrado. Todos los planteos que interpuso en el proceso de su enjuiciamiento fueron rechazados
"La suerte está echada” es uno de los dichos más populares de la Argentina, el cual puede aplicarse perfectamente a lo que le sucede al juez de Garantías platense, César Ricardo Melazo, quien el próximo martes deberá esperar la resolución que tome el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios en el marco del jury que se sigue en su contra.
Según pudo saber este medio, todo parece apuntar a que el cuestionado magistrado sería apartado preventivamente de su cargo, mientras en forma paralela avanza el juicio político, ya que todas las partes intervinientes piensan que las pruebas presentadas son “contundentes” y dejan establecido el mal manejo de las normas legales ejecutadas por Melazo.
Los informes presentados por la Comisión Bicameral de Enjuiciamiento de Magistrados y por la Procuraduría General de la Suprema Corte bonaerense serían lapidarios hacia el accionar del letrado. Desde esta última instancia ya afirmaron que existen elementos probatorios suficientes que hacen verosímiles los hechos por los cuales se lo señala, por lo que se daría vía libre a la acusación, dictaminándosele así su apartamiento provisorio del cargo.
En tanto, la Comisión Bicameral pidió una prórroga para expedirse, aunque trascendió que ese informe convalidaría también la acusación contra Melazo.
Este martes, todas las partes que participan en el jury se reunirán en lo que se llama “audiencia del artículo 34”, la cual se da cuando el jurado, ya teniendo a la vista todo el proceso presentado por la acusación y por la defensa del magistrado denunciado, decide si se admite o no el paso final hacia el juicio político, siendo así inmediatamente apartado en forma provisoria de su puesto.
Como se recordará, el tribunal de enjuiciamiento ya aceptó tratar el pedido de apartamiento preventivo del juez Melazo presentado por el senador Juan Pablo Allan (Cambiemos). Con esa decisión, para garantizar la legítima defensa, se le dio traslado al magistrado imputado para que demuestre que no existe gravedad en las acusaciones. Ahora, luego de 10 días, los representantes legales del juez ya elevaron el descargo.
Por eso, este martes será una audiencia clave, ya que se definirá casi con seguridad el apartamiento preventivo del juez. “Se trata de una disposición de transparencia. Una medida cautelar dentro del proceso del jury. Es que, si hay un fuerte convencimiento de que hubo irregularidades cometidas por Melazo, mejor es que no ejerza la magistratura mientras continúa el juicio político”, explicó un vocero del jurado de enjuiciamiento a este medio.
Defensa débil y explotación al máximo de artilugios legales
De acuerdo a lo que pudo saber este medio, la defensa planteada en el jury por el juez de Garantías, César Melazo, tuvo varios puntos flojos, no pudiendo demostrar de manera fehaciente que el letrado haya actuado conforme a la ley en los distintos procesos que se le imputan, lo cual sería determinante para que el sumario en su contra avance y la separación momentánea de su cargo sea casi un hecho.
Otro de los temas que jugó en contra del magistrado fueron sus constantes acciones para dilatar el proceso, “embarrando la cancha” con una serie de artilugios legales que demoraron los trámites, como las recusaciones realizadas a todos los integrantes del Jurado de Enjuiciamiento, que llegó a tocar incluso al presidente de la Suprema Corte, Luis Genoud.
Los retrasos en los que recayó el jury por los mecanismos legales usados por Melazo para desviar la atención del caso más que jugar a su favor lo hicieron en su contra, porque todos ellos fueron considerados como “aprietes” hacia los miembros del Tribunal para intentar volcar una causa que ya parece tener un rumbo irreversible hacia el apartamiento del juez.
Los expedientes que tienen a Melazo contra las cuerdas son tres: el primero es por cuatrerismo y abuso de autoridad, el segundo tiene que ver con el encubrimiento dado al exlíder de Hinchadas Unidas Argentinas, Marcelo Mallo, y el tercero se trata de una excarcelación polémica por la cual se entrometió en el ámbito del juzgado de Marcela Garmendia (ver aparte).
Acorralado en todos los frentes
El titular del Juzgado de Garantías Nº 2 de La Plata, César Melazo, tiene sobre su espalda una serie de denuncias que lo han dejado en la mira del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y Funcionarios de la Provincia de Buenos Aires.
La más importante de las causas que pesan sobre él es aquella que se le sigue por las irregularidades cometidas en una investigación judicial llevada adelante allá por el año 2002, donde se indagaba un caso de cuatrerismo por el robo de 4.000 chanchos y 1.000 caballos. Por esta causa, que concluyó con la destitución del entonces fiscal Carlos Gómez, Melazo fue acusado por abuso de autoridad, omisión de deberes inherentes al cargo, participación en extorsión y cohecho.
El segundo caso que desvela al magistrado se da por el irregular sobreseimiento dictado en febrero de 2015 al secretario general del gremio de Carga y Descarga (de camiones) del Mercado Regional de La Plata, Daniel Gustavo Vila, quien se encontraba acusado por una serie de incidentes que se habían dado en el organismo. La acusación se dio porque el juez, en este caso, estaba actuando como subrogante de la jueza Marcela Garmendia mientras esta vacacionaba, incurriendo así en un abuso de poder.
La última de las acusaciones se da por presuntamente haber facilitado la fuga del barrabrava K, Marcelo Mallo, líder de Hinchadas Unidas Argentinas y cercano a Aníbal “La Morsa” Fernández, tras ser sindicado como partícipe del doble crimen de Unicenter.