Nuevo procesamiento y embargo a Boudou
Fue a raíz de la compra “innecesaria” y “caprichosa” de 19 autos de lujo que realizó el exvicepresidente cuando era ministro de Economía. Según la resolución judicial, la adquisición se dio con abultados sobreprecios, en beneficio de un empresario amigo y en detrimento del Estado. Por esto, le inhibieron 3 millones de pesos
Por “caprichoso” y por haber avalado un “innecesario” negocio en beneficio suyo y de un empresario amigo, el exvicepresidente Amado Boudou sumó ayer un tercer procesamiento penal. Al menos así lo entendió el juez federal Sergio Torres, quien lo procesó y embargó por 3 millones de pesos a raíz de la compra con sobreprecios de diecinueve automóviles de lujo en 2009, cuando era ministro de Economía del gobierno de Cristina Kirchner.
Este procesamiento complica la situación judicial del exsegundo de CFK, ya que, además, está cerca de ser enviado a juicio oral por supuesto cohecho en la causa que investiga la venta de la ex Ciccone Calcográfica y fue enviado a juicio por la falsificación de documentos de un automóvil Honda, además de estar investigado por enriquecimiento ilícito.
Ahora, Torres lo procesó por el delito de “administración fraudulenta agravada por haber sido cometida en perjuicio de la administración pública” por la compra de esos diecinueve vehículos de alta gama. También lo citó a una nueva declaración indagatoria, en un desprendimiento de esta causa, por la supuesta falsificación de un informe de la Sindicatura General de la Nación hecha para justificar la fastuosa compra.
Para el juez, la transacción fue un “capricho” que implicó “la adquisición de un lote de vehículos no esenciales para el Ministerio de Economía, mediante subasta privada direccionada a la firma Guido Guidi SA por el valor de 2.131.400 pesos”, lo que significó un “pago abultado o desventajoso para el Estado”.
Torres, además, dio por probada tanto la amistad que existía entre Boudou y Guidi como el hecho de que uno de los vehículos fue destinado para su uso personal.
También Torres procesó como supuesto coautor al funcionario del Ministerio de Economía K, Benigno Alberto Vélez, y, en calidad de partícipes necesarios, a Daniel Gustavo Reposo, entonces titular de la Sindicatura General de la Nación (Sigen) y frustrado candidato a procurador general (a quien le impuso 2.500.000 pesos de embargo), al exfuncionario Álvaro Palencia Reffino y a los empresarios Fernando y Guido Guidi.
Además, el juez amplió la imputación contra todos ellos por la supuesta falsificación de un informe de la Sigen que habría sido usado para la compra de los 19 autos Volkswagen: 13 Bora, tres Passat y tres Vento. También los citó a declaración indagatoria entre el 19 y 23 de este mes.
La denuncia que dio origen a esta causa fue radicada en 2010 por el abogado porteño y titular de la Asociación Civil Anticorrupción Ricardo Monner Sans.
En el transcurso de la investigación se habría barajado la hipótesis de que el Audi A4 que manejó Agustina Kämpfer, entonces pareja del vicepresidente, supuestamente habría sido recibido a modo de dádiva por la compra de vehículos para el Ministerio de Economía.
A un paso del juicio oral por Ciccone
El mes pasado, Boudou, su exsocio José María Núñez Carmona y el empresario Alejandro Vandenbroele quedaron a un paso del juicio oral por intentar apoderarse de la ex Ciccone Calcográfica.
En este caso, además, la Justicia investiga al exgarante de la impunidad K, Ricardo Echegaray, por haber accedido a un pedido de Boudou y haberle otorgado a la imprenta, desde la AFIP, un plan de pagos en 148 cuotas, con un ínfimo interés, para saldar una deuda millonaria. Incluso, tal como reveló el diario Hoy en su edición del 16 de marzo de 2015, Echegaray habría intentado quedarse con “la máquina de hacer billetes”, hasta que Boudou le ganó de mano.