Obras para los próximos 20 años
El titular del Ministerio de Infrestructura bonaerense se reunió virtualmente con los integrantes de las comisiones de Obras Públicas, Servicios Públicos, y Energía y Combustibles.
La Comisión de Obras Públicas de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires, presidida por Walter Abarca, realizó un encuentro virtual con el titular del Ministerio de Infrestructura bonaerense, Agustín Simone, con el objetivo de conocer los ejes de uno de los planes estratégicos de obras públicas que proyecta el gobierno bonaerense.
Simone se reunió virtualmente con los integrantes de las comisiones de Obras Públicas, Servicios Públicos, y Energía y Combustibles. Fue para informar que, durante los cuatro años de gestión de Vidal , la ejecución de la obra pública fue mala y, en el último año, puntualmente baja. Esto dejó a la Provincia con la obra pública parada, desde antes del proceso eleccionario que terminó con Vidal dejando el sillón de Rocha.
El ministro se extendió puntualizando en qué situación había recibido su área y cuáles eran los ejes de trabajo, para después responder a las preguntas realizadas por los diputados.
El funcionario del Gabinete provincial explicó que desde calle 6 hay un plan estratégico pensando hacia adelante, a los próximos 20 años, y que Kicillof trabaja en ese sentido, mirando hacia adelante. También informó que cuando el plan esté diagramado y tenga forma, el proyecto será presentado en la Legislatura para ser evaluado por los diputados.
Asfalto, rutas, logística, aguas, cloacas y distribución de energía son parte de ese plan que hoy está en un borrador yendo del despacho del gobernador al de Simone. De momento, se encuentra frenado por cuestiones relacionadas a la pandemia, pero cuando sea tiempo, será ejecutado por etapas.
Desde la Comisión de Obras Públicas, señalaron con cierto asombro que desde hace mucho tiempo “no se escuchaba a un ministro hablar de un plan, de desarrollo y de obra pública para la provincia de Buenos Aires”, sobre todo porque se planea que exceda, y por mucho, al tiempo de gestión. Una actitud que no es habitual en política, donde nadie quiere empezar con obras que puedan finalizarse cuando, quien las ideó, ya no las pueda inaugurar.