Peritaje de Gendarmería confirmó que a Nisman lo mataron dos personas luego de drogarlo con ketamina

A poco más de 32 meses de la muerte del exfiscal de la causa AMIA, Alberto Nisman, ayer se conoció formalmente el informe oficial firmado por los expertos de la Gendarmería Nacional, que señala que al funcionario judicial lo mataron dos personas, primero golpeándolo y luego drogándolo con ketamina para controlarlo.

Para llegar a dicha hipótesis, los expertos oficiales ponderaron distintas pruebas como la falta de pólvora en las manos, la ketamina hallada en el cuerpo de Nisman que no había sido advertida en su momento, la llamada “autopsia psicológica” o la manipulación del celular y las computadoras, todas estas sostenidas por la querella como indicadores de un magnicidio.

Tras el informe de la Gendarmería inclinándose por la teoría de un homicidio, se espera que los peritos de la defensa de Diego Lagomarsino, que le prestó a Nisman el arma desde la cual salió el balazo que lo mató, no acompañen esa versión y den su interpretación de los hechos, como un suicidio, en coincidencia con lo que habían postulado los peritos de la Corte Suprema en una junta médica que también se dispuso en la causa.

La Gendarmería cree que Nisman estaba inconsciente por la ketamina y que una persona lo sostuvo mientras que otra le pegó un tiro en la cabeza. Incluso la aparición de golpes en la cabeza y en las piernas fueron interpretados como orientados a reducir a la víctima.