Pichetto cometió una “descalificación discriminatoria”
Así lo determinó el Inadi, luego de las declaraciones del exsenador contra la ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad. El organismo citó al dirigente de Juntos al diálogo. Sin embargo, este se negó y reafirmó su postura.
El equipo técnico del Inadi evaluó los dichos del exsenador sobre la ministra de las Mujeres, Ayelén Mazzina.
“El Ministerio está en manos de una chica que es lesbiana, pero si es Ministerio de la Mujer, podrían haber puesto a una mujer”, había declarado el dirigente de Juntos por el Cambio en un canal de televisión.
Luego del repudio por sus palabras, el organismo determinó que Pichetto incurrió en “una descalificación discriminatoria por su pertenencia a un grupo especialmente protegido”. Además, lo había citado a dialogar para analizar esta situación. Sin embargo, el exsenador se negó y reafirmó su postura.
“El informe jurídico elaborado por el área correspondiente alerta sobre los discursos que niegan derechos y promueven prejuicios y estereotipos, y su potencialidad de multiplicar prácticas discriminatorias en nuestra sociedad”, expresaron.
Además, indicaron que las declaraciones “niegan la igualdad de condiciones y la capacidad respecto de otras mujeres, en este caso de la ministra Mazzina, para ocupar su cargo”.
Los dichos de Pichetto se habían enmarcado en un “reclamo” hacia la ministra Mazzina por no haberse expedido con respecto al crimen de Lucio Dupuy, a pesar de que la funcionaria ya lo había hecho.
En este sentido, los técnicos analizaron que Pichetto atribuye a la ministra “una supuesta falta de interés sobre el caso de Lucio Dupuy, y señalando como posible causa de esa conducta el hecho de que sus autoras tienen su misma orientación sexual”.
“De esta manera se vincula de manera deliberada un crimen aberrante como el de Lucio con la orientación sexual de las autoras, que, a su vez, como explicita el propio autor de los dichos, coincide con la de la ministra y motiva su descalificación”, fundamentaron.
Por último, concluyeron en que “las manifestaciones vertidas contienen valoraciones peyorativas respecto de la orientación sexual para referirse al desempeño de una persona, dando lugar a la discriminación materializada en una inferiorización del otro”.