Auditoría de la Cámara Electoral

Polémica por irregularidades en las cuentas de campaña de Scioli

Continuan la polémica por nuevas irregularidades en las cuentas de la campaña presidencial de Daniel Scioli. Una auditoría de la Cámara Electoral señala serias deficiencias en las donaciones y los gastos realizados por el Frente para la Victoria. Cambiemos también presenta irregularidades que complicarían al presidente Macri.

El nombre de Maximiliano Castrillón esta siendo célebre en las páginas de trama urbana por integrar una red de trata que explotaba sexualmente a mujeres en prostíbulos de Capital Federal. Pero ese nombre resonó en la auditoría cuando se verificó que aportó 10.000 pesos a la última campaña presidencial del Frente para la Victoria (FPV).

Los $ 4 millones de Carlos Tomeo aparecieron la semana pasada en la portada de todos los diarios. La Justicia lo investiga por lavado de dinero. Deberá justificar su acelerado crecimiento patrimonial, que le permitió comprar 11 propiedades, 20 autos de lujo y decenas de relojes Rolex. Tomeo aportó $ 95.000 a la última campaña presidencial de Cambiemos.

Los apellidos Castrillón y Tomeo son algunas de las observaciones que se desprenden de las auditorías realizadas por la Cámara Nacional Electoral (CNE) sobre los informes de financiamiento de las últimas elecciones generales y la segunda vuelta presidencial. Los informes describen decenas de irregularidades, tanto del FPV como de Cambiemos: cientos de donantes que no pueden justificar su patrimonio, empresarios proveedores del Estado, multitudinarios eventos proselitistas no declarados y gastos de campaña facturados por organismos públicos.

La Cámara Electoral elaboró las auditorías a través del cruce con distintas bases de datos, como información de la AFIP, la Anses y otros registros del Estado. De esta manera, los auditores analizaron, por ejemplo, el origen de los fondos aportados por casi 500 monotributistas que registraron donaciones a la campaña de Scioli. La mayoría está inscripta en la categoría B -la más baja-, que permite facturar hasta 48.000 pesos anuales. En muchas ocasiones, sólo la contribución electoral supera ese monto.

Entre los aportantes, la Justicia hizo hincapié, en el caso de Cambiemos, en la contribución de cinco personas vinculadas a la firma Eva SA que donaron, en total, más de 400.000 pesos a la campaña de Macri. Según reveló Chequeado, Eva SA ganó en noviembre de 2015 una licitación en la ciudad de Buenos Aires para la operación y el mantenimiento de una planta de tratamiento de restos de poda y de una planta de residuos orgánicos. La ley prohíbe aportes de empresas concesionarias del Estado.

"No hay nada fuera de la ley. Estas personas fueron a la cena de recaudación del partido. Sus aportes están dentro de la ley porque es el dinero de personas físicas, más allá de que trabajen para una empresa concesionaria del Estado. Es plata del partido que, después, pasó a la campaña", explicó Torello.