Por los intermediarios, pronostican aumentos en el precio de la yerba

Ante la falta de regulación oficial, los productores advierten que el kilo de una marca intermedia podría llegar a costar 100 pesos en las próximas semanas. Temor entre los consumidores por la suba de una infusión que se toma a diario

Las economías regionales en la Argentina no están pasando un buen momento. Uno de los sectores que sufre complicaciones es el de la producción de yerba mate, donde a pesar de haber crecido la cosecha durante la temporada pasada, los precios que reciben los productores se mantienen bajos en comparación y siguen sin controlarse.

Frente a ello, ante los reclamos que venían sosteniendo los chacareros, desde el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) se emitió en diciembre pasado la Resolución 465/2017, la cual busca establecer reglas mínimas, precisas y equitativas para los operadores que intervienen en la cadena de producción, como son los intermediarios.

Dicha disposición busca moderar el poder de los comercializadores, sin embargo la misma al día de hoy sigue sin cumplirse, dejando un tendal de dudas. Según advierten desde las entidades agrarias, los que obtienen más ganancias son aquellos que imponen un precio mínimo a los productores, que en este caso es de $6,30 por kilo para la hoja verde y de $23 el kilo para la yerba canchada o procesada. Luego, en las góndolas se multiplica por más del 200%, alcanzando el paquete de una marca media el valor de $65 el kilo.

De este modo, el margen de ganancia es muy bajo para quienes elaboran la yerba, que han visto mermar su capacidad de hacerle frente a la cosecha. Al no existir ninguna clase de controles hacia la industria yerbatera por parte de las autoridades, desde las cámaras que nuclean a los pequeños y medianos productores advierten que ante la escalada del dólar y los precios de exportación, los intermediarios intentarán obtener una mayor ganancia en el mercado interno, lo que puede llevar el precio del producto a los $100 por kilo en las próximas semanas.

Sin controles

Datos oficiales muestran que durante 2017 la industria envió a supermercados y mayoristas de todo el país poco más de 260 millones de kilos de yerba mate elaborada, es decir, despachó 5 millones de kilos más que en 2016, sin que eso significara un mayor rendimiento o mejores ganancias para los productores.

Raúl Kosinsky, vicepresidente de la Federación Agraria Argentina de la provincia de Misiones, le aseguró a este medio que “a las inclemencias climáticas del año pasado, de las cuales todavía no hemos podido sobreponernos, le sumamos los incumplimientos por parte de las autoridades al momento de regular a los intermediarios, que pagan miserias a los productores y hacen que la yerba después salga fortunas para los ciudadanos en los supermercados”.

Para el yerbatero de la zona de Apóstoles, “todos los ingresos que le faltan al productor por la labor de los comercializadores se lleva a la producción general, como ya vemos con la caída de hoja y con una cosecha que no es tan alta como se esperaba. Esto puede llevar sin dudas a que los precios se eleven en estos primeros meses del año y un kilo de una marca promedio llegue a los 100 pesos para el consumidor”.

“Sin un control por parte del Estado y del Instituto Nacional de la Yerba Mate, la actividad de miles de productores pequeños y de pequeños secaderos podrían quedar en el camino. Con todo esto lo que puede pasar es que los intermediarios terminen llevando el precio final del producto a altos valores, pagando un artículo hasta cuatro veces más de lo que se le paga al productor”, resaltó Kosinsky.

Un mercado paralelo y en negro

Una de las situaciones que más padecen los productores yerbateros en el norte del país es la existencia de un mercado paralelo o en negro, que les paga cifras míseras por el kilo de hoja verde o de la yerba sometida a una primera molienda gruesa.

Los elaboradores de un producto clave para la vida de los argentinos sostienen que, a pesar de las múltiples denuncias que le han realizado a las autoridades para resolver este problema, no se ha hecho prácticamente nada al respecto.

Este mercado negro que predomina en buena parte de la cadena de producción se da principalmente en la provincia de Misiones, donde se le está dando a los productores $3,70 por el kilo de hoja puesto en secadero y entre $14 y $15 por el kilo de yerba canchada, muy por debajo de los $6,30 y $23 estipulados por el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM).

Cálculos manejados por las entidades agrarias afirman que alrededor del 40% de la producción total de yerba mate se maneja por este mercado paralelo, que lo único que hace es garantizar precios bajos para los productores y precios muy altos para los consumidores ante la situación irresuelta del papel que cumplen los intermediarios en la cadena de producción.

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