Secco duro con los intendentes opositores: "Si no les dan obras, que se jodan"
"Si vos no te medís cuando hablas de la Presidenta, no pidas que te manden obras", continuó el intendente de Ensenada, Mario Secco, quien parece justificar el criterio del Ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, al momento de asignar obras a los diferentes municipios y distritos. Se trata del plan “Más Cerca”, que repartirá obras por 12000 millones de pesos y de los que habrían quedado afuera intendentes opositores.
El intendente de Ensenada, el kirchnerista Mario Secco, parece no tener límites al momento de justificar las políticas confrontativas del gobierno nacional. Se trata de las declaraciones que realizó en relación a la asignación del plan “Más Cerca”, que repartirá obras por un total de 12000 millones de pesos y que el Ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, negó a los intendentes opositores al gobierno de Cristina Kirchner.
"Si vos no te medís cuando hablas de la Presidenta, no pidas que te manden obras", aseveró el intendente con el objetivo de justificar una política violenta que niega la participación de los municipios opositores, en planes federales o impulsados desde el Ministerio de Planificación que significan una fuente de trabajo real y una inversión más que necesaria para las ciudades del país.
Las polémicas declaraciones de Secco no concluyen allí. “Que se jodan”, agregó el intendente, haciendo referencia a los vecinos de los municipios marginados en estos planes federales.
Secco bautizó al ministro De Vido como "el San Pedro de los intendentes" y defendió la lógica del gobierno nacional en la repartición discrecional de fondos públicos y planes de trabajo.
"¿Somos boludos nosotros? Por qué les vamos a dar obras a los que quieren un proyecto liberal, conservador, los que hicieron cagar de hambre a ciudades como la nuestra. Me vas a decir que soy un zurdo de mierda y revolucionario, pero no los puedo ni ver. La derecha de Estados Unidos te corta el pelito, te manda al médico, quieren que la gente produzca, que sean buenos obreros. Acá te caga de hambre, te tortura, te secuestra y te asesina solamente por pensar distinto", dijo.
Y fue por más
El intendente de Ensenada, no satisfecho con la sentencia a los intendentes opositores y sus vecinos, continuó con su descargo y arremetió contra los bloques políticos de la oposición.
"¡Nos putean todos los días y encima se enojan y piden obras! Que se la aguanten", enfatizó. Lo mismo cuando se lo consultó por los vecinos de esos municipios. "Si vos tenés un intendente malo y lo votás, jodete. Que se jodan por votar lo que votaron", insistió.
Además, identificó a los intendentes ligados al PRO, como Jorge Macri (Vicente López) y Jesús Cariglino (Malvinas Argentinas), con los liberales "que si pueden te matan". Y, junto al "radicalismo de derecha", los definió como el "modelo sanguinario" del país.
"¿Cómo no va a estar bien?", continuó. "Nosotros construimos un modelo, ponemos la cara. Ellos no se miden cuando hablan de la Presidenta y encima quieren obras. Si puteás a la Presidenta no pidas obras para mostrarte exitoso. Yo sí espero obras porque defiendo al modelo, pero mirá si vamos a darles plata a los cachivaches de Pro", destacó.
“Más Cerca” para pocos
A mediados de 2012, Julio De Vido convocó a todos los intendentes kirchneristas bonaerenses y de otras provincias, para prometerles obras del plan "Más Cerca". No fueron invitados los jefes comunales opositores ni los peronistas díscolos cercanos al gobernador Daniel Scioli o el intendente de Tigre, Sergio Massa.
Al que le toca le toca, parece ser la lógica que encarna el kirchnerismo al momento de la asignación de obras o de planes de trabajo para municipios no kirchneristas, pero que no mantienen una relación confrontativa con los K. "No sabría decirte. No soy el que reparte, soy el que pide", se disculpó ante el interrogante de por qué no reciben obras los municipios no K, que no critican a Cristina.
"No voy a hablar mal de algunos compañeros", se excusó, frente a los funcionarios que supieron compartir el gobierno del expresidente Carlos Menem y que hoy son fieles abanderados del kirchnerismo.
La postura de Secco expresa una pauta cada vez más marcada entre los funcionarios del kirchnerismo. Las políticas de confrontación son moneda corriente para esta tendencia política que se sostiene en base a mantener al margen de planes y proyectos de obras a todos aquellos que no se sometan plenamente a la doctrina K. Nuevamente, trabajadores y vecinos, quedan en medio de una disputa signada por la intolerancia kirchnerista y la repartición discrecional de fondos y recursos del Estado.