Tras dos semanas, aún no se sabe quién sucederá a Alperovich
A más de dos semanas de las elecciones del 23 de agosto, los tucumanos todavía no tenían hasta ahora una certeza respecto de quién gobernará la provincia por los próximos cuatro años, a partir del 10 de diciembre, cuando José Alperovich deje el Poder Ejecutivo luego de tres mandatos consecutivos.
Por estas horas, la atención está centrada en dos frentes: en los tribunales provinciales, donde se tramita una denuncia de la oposición para que se declare la nulidad de los comicios por un supuesto fraude y en la Junta Electoral Provincial (JEP), que ayer retomó el escrutinio definitivo, tras un receso por el fin de semana.
De acuerdo con el último parte oficial difundido ayer, computadas las actas de 1495 mesas (el 41,52% sobre un total de 3.601) %, el candidato a gobernador del Acuerdo para el Bicentenario (APB), José Cano, obtenía el 49,63% de los votos contra el 39,96% de Manzur. La diferencia parcial de 10 puntos a favor del diputado radical en este punto del escrutinio final obedece a que hasta ayer la tarea de JEP estuvo enfocada en las urnas de la sección Capital, donde la oposición hizo su mejor elección. En ese circuito, el diputado radical obtuvo casi 20 puntos de ventaja sobre el kirchnerista Manzur. La JEP tiene previsto comenzar hoy con el escrutinio de las mesas de la sección Oeste, donde el FPV obtuvo una diferencia que rondaría el 30%, al igual que en el Este, cuyas mesas serán las últimas en escrutar. Por esta razón, se espera que Manzur vuelva a ubicarse adelante en la medida en que avance el recuento del interior.
Según el escrutinio provisional realizado por el Correo el día de la elección, el postulante oficialista alcanzaría la gobernación con un 54% de los sufragios contra un 40% del radical Cano, líder del APB, en el que confluyen la UCR, Pro, el peronismo disidente, un sector del Frente Renovador y Progresistas.
En tanto, se espera que la Sala 1 de la Cámara en lo Contencioso Administrativo, que es donde recayó el recurso de amparo presentado por el APB en el que se solicitó anular las elecciones y la convocatoria a una nueva votación, corra hoy traslado de la demanda al Estado provincial. Ayer a la tarde, la JEP respondió al pedido de informes que había solicitado el tribunal, integrado por los jueces Horacio Castellanos y Salvador Ruiz. En el escrito, el organismo defendió la transparencia del proceso electoral y descartó la existencia de situaciones irregulares que justifiquen la anulación de los comicios. Una vez que el gobierno tucumano ejerza su defensa por escrito, los magistrados estarán en condiciones de emitir una sentencia.
El apoderado del APB, Daniel Ponce, dijo que hoy pedirán "que se resuelva la cautelar que a que se suspenda el escrutinio definitivo, con habilitación de días y horas, para evitar que siga avanzando un proceso que está totalmente viciado, hasta tanto se resuelva el planteo de fondo".
El último viernes, el APB, a través de Cano y de su compañero de fórmula en el APB, el intendente peronista de esta capital, Domingo Amaya, presentaron un recurso de amparo en el que pidieron que se declaren nulos los comicios del 23 de agosto. Además, plantearon una cautelar pidiendo que se suspenda el escrutinio final que lleva adelante la JEP, para evitar que se avance con un proceso "fraudulento e irregular", según definieron.
Como pruebas, el frente opositor presentó tres cajas con documentación testimonial, fotos, recortes periodísticos y videos que acreditarían la existencia de un extenso listado de irregularidades, incluidos el incendio de urnas, el clientelismo, el voto cadena, falsificación de planillas, la adulteración de los padrones y el sufragio de personas fallecidas o de ciudadanos que viven en otras provincias.
Además del planteo del APB, en la Cámara en lo Contencioso Administrativo hay otras denuncias similares presentadas la semana pasada por el Partido Socialista y por el frente Alternativa Popular, aliados del espacio que conduce Cano.
Hasta el momento, la JEP procedió a la apertura de más de 500 mesas, de las cuales sólo fueron anuladas once (tres de la capital y ocho del interior) por distintas irregularidades: algunas estaban vacías, otras contenían solamente sobres y en otros casos no coincidían la cantidad de electores con los votos emitidos..
