Vidal prorrogó la Emergencia Administrativa y de Infraestructura
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La gobernadora decidió extender por un año más la medida que habilita dispositivos para dinamizar las compras o servicios en el Estado provincial. Buscan acelerar las reformas encaradas por el Ejecutivo para acabar con “los años de desinversión”
El gobierno de la Provincia de Buenos Aires, con la firma de la gobernadora María Eugenia Vidal, promulgó ayer la prórroga por el lapso de un año de la Emergencia Administrativa y Tecnológica y la de Infraestructura, habilitando así los procesos de excepción para apresurar las adquisiciones o servicios que presta el Ejecutivo.
La intención central de esta prolongación tiene que ver con la decisión de saltearse todas las trabas burocráticas que entorpecen y hacen más lenta la gestión, agilizando de esta manera las compras que se hacen desde el Estado bonaerense para dar solución rápida y efectiva a los problemas urgentes de la sociedad.
El año pasado, la Legislatura provincial había sancionado las leyes de Emergencia 14.812 (infraestructura, hábitat, vivienda y servicios públicos) y la 14.815 (Administrativa y Tecnológica), y en su interior dejaba en claro que las mismas tendrían “una duración de un año, contado a partir de su entrada en vigencia, pudiendo ser este prorrogado por el Poder Ejecutivo por única vez y por igual término, en caso de verificarse que las causales que justifican la emergencia no han cesado”, algo que finalmente se concretó ayer.
Por medio de las emergencias, el gobierno posee la potestad de adoptar en forma inmediata, y sin intermediación de ningún tipo, todas las medidas que estime necesarias para proceder a la reorganización y planificación de los aspectos de la administración, ya sea de recursos humanos, operativas o materiales.
Paliando déficits
De acuerdo a lo establecido por la gobernadora en su decisión, existe en la actualidad una situación “crítica” al interior de la Provincia en materia de obras y en su desarrollo en los distritos, y, a pesar de las acciones promovidas, “persisten las causales que motivaron la sanción del régimen especial”, declaró.
Como una manera de paliar los altos déficits que evidenciaba la Provincia, Vidal y su equipo de trabajo se propusieron ejecutar un ambicioso plan de obras públicas, con lo cual en estos primeros 16 meses desde la administración de Cambiemos se ha volcado más de 35.000 millones de pesos en los 135 municipios, encarándose en forma conjunta más de 2.300 obras de infraestructura.
Además, entre las razones esbozadas para alargar las emergencias, el Ejecutivo mencionó “la crítica situación que afectó a la totalidad de las áreas administrativas dependientes del Poder Ejecutivo y, especialmente, a la prestación de los servicios esenciales a cargo de la administración pública provincial, centralizada y descentralizada. Ello como consecuencia de los años de desinversión y de administraciones imperfectas, que provocaron una actuación estatal deficiente e ineficaz”.
Según Vidal, desde la irrupción de las leyes de Emergencia, se pudo mostrar en toda la administración los “beneficios operados en la administración pública provincial, a pesar de no haber desaparecido las causales que justificaron su sanción”.
Esto último es lo que llevó a que el gobierno considerara “necesario, oportuno y conveniente continuar con la agilización administrativa puesta en marcha a partir de su sanción y prorrogar por el plazo de un año la aplicación de la mentada ley”.
Con esta medida, el gobierno de Vidal busca mostrar fuerza en su gestión, con acciones concretas que logren dar respuestas sólidas y soluciones efectivas a los problemas reales de la población.