Brutal asalto a un matrimonio de jubilados: un relato de terror

En la madrugada previa al fin de semana largo, un matrimonio de jubilados, de 77 y 78 años, vivió un episodio de terror en su hogar ubicado en la zona de 54 y 29, frente al Parque San Martín, en La Plata. Al menos tres delincuentes ingresaron a su casa, los ataron y los castigaron brutalmente.

Según las investigaciones preliminares, el hecho ocurrió alrededor de las 4:30 de la mañana, cuando los propietarios estaban descansando. Los indicios apuntan a que los intrusos ingresaron por el techo, violentaron una ventana y doblaron una reja para acceder al interior de la vivienda.

Los ladrones, con el rostro cubierto para evitar ser identificados, despertaron al dueño de casa y comenzaron a golpearlo sin mediar palabra. Estaban convencidos de que había dólares en la casa y exigieron a la víctima que revelara su escondite. Para lograr su objetivo, emplearon técnicas de tortura extremadamente violentas. Golpearon al hombre en la cara, en las costillas, en las piernas y en la cabeza. Incluso amenazaron con hacerlo rodar por una escalera.

Bajo presión y violencia, la víctima entregó 250 mil pesos. Sin embargo, los ladrones no quedaron satisfechos con el botín y continuaron golpeándolo. En un giro afortunado de los acontecimientos, uno de los sensores de la alarma detectó movimiento y se activó. El ruido puso en fuga a los asaltantes.

El nivel de crueldad fue tal que tanto el dueño de casa como su esposa necesitaron atención médica debido a los golpes recibidos y al estrés sufrido durante el incidente. Fueron atendidos por personal del SAME.

Operativo en la zona oeste

Una banda de delincuentes cayó tras perpetrar una entradera en la intersección de 151 y 515. Los integrantes fueron detenidos en el domicilio donde resguardaron los elementos sustraídos a la víctima, un hombre 47 años.

En horas de la madrugada, los malhechores sorprendieron al sujeto cuando llegaba a su domicilio. Armados, lo redujeron, tomaron varios objetos de valor del interior de la casa y escaparon en su Peugeot 308. Lo que los malvivientes no tuvieron en cuenta fueron las cámaras de seguridad, las cuales permitieron registrar sus vestimentas y su huida.

Así, se puso en marcha un operativo cerrojo con el cual el Comando de Patrullas halló el vehículo abandonado en 161 y 521. Luego, se identificó la ubicación donde el grupo se reunió a repartir el botín, y se ordenó un allanamiento en 157 y 518. Allí fueron aprehendidos los perpetradores del delito: dos menores de 17 años y una mujer de 35, madre de un cuarto integrante que continúa prófugo.

En el lugar se encontró otro auto, un Renault Sandero negro, al cual los hampones traspasaron los elementos robados. Precisamente, en el asiento de atrás había dos televisores, dos armas de fuego y un chaleco antibalas.