“Caí en esa casa porque no tenía otro lugar en el mundo adonde ir”
Sonia Molina, quien permaneció raptada y sometida a tormentos durante tres meses en la casa de una periodista y su marido en Coronel Suárez, dijo que fue a esa vivienda porque “no tenía otro lugar en el mundo adonde ir” y afirmó que “todavía me cuesta creer” lo que pasó. También, que imaginó que con Estefanía Heit (la acusada), “podíamos ser amigas”.
“Ahora estoy mucho mejor, pero la sensación de miedo no me la saca nadie, no sé cuándo voy a poder pensar en otra cosa más”, expresó Molina en declaraciones periodísticas. La mujer sostuvo saber “que me secuestraron. Yo caí en la casa de ellos porque estaba desesperada, no tenía otro lugar en el mundo donde ir. Nunca pensé que ellos, que hablaban tanto de Dios, iban a hacerme esto, todavía me cuesta creer”.
“Sentía que me hacían mal, que me daban de comer para atragantarme, después para que no viera me sacudían con un spray de limpieza en los ojos”, relató. Molina sigue internada en el Hospital Municipal y se espera que este viernes los acusados presten declaración indagatoria.