Delincuentes atacaron a una jubilada en una violenta entradera

Otro violento asalto ocurrió en Altos de San Lorenzo, una de las zonas más peligrosas de la ciudad, y esta vez tuvo como víctima a una jubilada que sufrió un robo bajo la modalidad conocida en la jerga policial como “entradera”. Un grupo de delincuentes irrumpió en su vivienda y poco después escaparon con el botín a bordo de un vehículo que se desplazaba a gran velocidad.

Los hechos ocurrieron durante la noche, pasadas las 23 horas, en una casa ubicada en las calles 15 entre 76 y 77. Ese momento, la mujer estaba acompañada por su nieto cuando de pronto seis sujetos armados irrumpieron en la finca y comenzaron a amenazarlos a ambos, exigiéndoles que les entregaran todo el dinero que tuvieran guardado en la propiedad.

Tras varios minutos de calvario y luego de revolver algunos rincones del domicilio, los hampones decidieron huir. Para darse a la fuga utilizaron un automóvil marca Ford Focus de color gris con vidrios polarizados; el mismo rodado con el cual habían arribado según se pudo apreciar después en la visualización de las cámaras de vigilancia de los alrededores.

Afortunadamente, a pesar de la pesadilla que tuvieron que atravesar, las víctimas no sufrieron heridas y resultaron ilesas. Por su parte, los uniformados comenzaron la búsqueda de los sospechosos y mediante las filmaciones, intentarán determinar si el coche en el que circulaban había sido robado. En este sentido, el caso quedó en manos del personal de la comisaría Octava y por el momento no hay detenidos.

Ni la lluvia los para

Además de la entradera se registró otro episodio de inseguridad en Altos de San Lorenzo, a escasas cuadras del lugar. En este caso, sucedió en las calles 19 y 83, donde dos ladrones que se movilizaban en bicicleta, sustrajeron una caja de herramientas y un bolso de bebé, en un hecho que quedó grabado por las cámaras instaladas en la zona.

La copiosa lluvia que cayó en la ciudad en las últimas horas, no le puso freno a las ansias delictivas de los maleantes que, haciéndose los disimulados, tomaron el botín y luego escaparon pedaleando como si nada hubiera pasado, tratando de no levantar sospechas entre los transeúntes y automovilistas.

Las víctimas del robo pidieron difundir las imágenes de la huida de los hampones, no solamente para alertar a los vecinos, sino también con el objetivo de que sean identificados y así poder recuperar sus pertenencias.