Ringuelet

Denuncian que ladrones lanzan cascotes desde el puente de 7 y 509

Según los damnificados, en cuanto cae el sol un grupo de maleantes aprovecha para arrojar objetos contundentes desde lo alto para hacer chocar a los automovilistas y luego robarles.

La zona de 7 y 509 se ha vuelto un verdadero terror para los automovilistas, que denuncian ser víctimas de intentos de robo por parte de delincuentes que arrojan grandes piedras desde lo alto del puente que se emplaza en el lugar.

Según denunciaron vecinos de nuestra ciudad, se han registrado allí diversos ataques, aunque por el momento no hubo que lamentar heridos o víctimas de gravedad. No obstante, sí hubo casos donde algunos transeúntes fueron asaltados.

Uno de esos episodios tuvo lugar durante la noche, cuando dos jóvenes salían de entrenar de un club de fútbol que se ubica en las cercanías. Sin embargo, al llegar a la mencionada esquina, fueron abordados por maleantes, quienes tras amenazarlos les arrebataron sus celulares y su ropa deportiva. Luego, se dieron a la fuga corriendo y al momento no se sabe nada de ellos.

Horas más tarde, pasadas las 22, otro vecino afirmó que cuando volvía de trabajar al pasar con su auto por debajo del puente había un grupo de menores de edad tirándoles piedras a los demás coches, con claras intenciones de hacer perder el control a los conductores para luego poder asaltarlos.

Según los denunciantes, los involucrados en esta salvaje modalidad de robo son menores de entre 10 y 12 años, que suelen estar acompañados de jóvenes de mayor edad. Cabe mencionar que anoche, en la misma zona, también se registró un hurto, cuando vieron a un grupo de chicos arrastrando una soldadora de gran tamaño que presuponen habría sido robada de un taller del barrio.

Antecedente reciente

Esta misma metodología de arrojar piedras desde la altura fue utilizada por otros delincuentes en inmediaciones del Parque Ecológico. Tal como informó diario Hoy en su edición anterior, un matrimonio y su pequeño hijo de cinco meses, cuando circulaban por la entrada principal del Ecológico, más precisamente por las calles 426 entre 18 y 21 A, fueron atacados por un grupo de sujetos desconocidos.

“Nos tiraron con cascotes de hormigón para que frenemos y así poder robarnos”, comentó la víctima. Además, relató: “Una de las piedras de gran tamaño me impactó a mí”, y no dudó en agregar: “Gracias a Dios mi bebito estaba del otro lado”.

Noticias Relacionadas