Detienen a un joven y a un menor por el crimen del colectivero Barrientos

Se trata del chofer al que mataron a balazos en el medio de un robo que tuvo lugar dentro de la propia unidad. Los nuevos sospechosos tienen 15 y 21 años.

Un joven de 21 años y un menor de 15 fueron detenidos acusados de ser presuntos partícipes del crimen del colectivero Daniel Barrientos, asesinado de un balazo durante un asalto a bordo de una unidad de la línea 620 el 3 de abril último en el partido bonaerense de La Matanza.

Las detenciones se concretaron en las inmediaciones del centro comercial Catán Shopping, ubicado en la colectora de la Ruta 3 entre Andonaegui y Almagro, de la localidad de González Catán. Las fuentes informaron que los aprehendidos fueron identificados como EMM (21), alias “Magu”, y un adolescente de 15 años, que por su edad es inimputable y cuya identidad se reserva por cuestiones legales.

Ambos sospechosos apresados están acusados de ser los autores del delito de “robo agravado por arma de fuego seguido de homicidio criminis cause en poblado y en banda agravado por la intervención de un menor” en perjuicio de Barrientos (55).

El fiscal de La Matanza, Carlos Adrián Arribas, a cargo de la investigación, indagará en las próximas horas a Muñoz, mientras que el adolescente quedó a disposición del Fuero Penal de Responsabilidad Juvenil del mismo distrito.

Muñoz y el menor de edad fueron apresados luego de allanamientos llevados a cabo en distintos puntos de las localidades de Ciudad Evita, Virrey del Pino y González Catán, todas de La Matanza, ordenados por el fiscal Arribas y llevados a cabo por el Departamento de Homicidios de la Policía bonaerense.

El crimen del colectivero Daniel Pedro Barrientos fue cometido el lunes 3 de abril pasadas las 4.30, cuando dos delincuentes abordaron el transporte en la parada ubicada en el cruce de Bernardino Escribano y Cullen, del barrio Vernazza, en Virrey del Pino.

Bajo amenazas con armas, los ladrones le robaron la mochila a una pasajera y luego dispararon contra el chofer indefenso, a pesar de que no ofreció resistencia.

Barrientos recibió un tiro y murió sentado al volante de su unidad. Ante esa situación, un efectivo de civil de la Policía de la Ciudad que estaba entre los pasajeros extrajo su arma reglamentaria y se enfrentó a tiros con los asaltantes, que escaparon.

Noticias Relacionadas