Doble entradera en el barrio cerrado El Quimilar
La semana pasada ya había ocurrido un hecho de similares características, el cual fue informado en exclusiva por este medio.
En lo que se trató de un nuevo episodio de inseguridad en un barrio semicerrado de Villa Elisa, esta vez por partida doble, un grupo de delincuentes perpetró en la madrugada del viernes dos entraderas, casi en simultaneo, y escaparon con un cuantioso botín.
Según indicaron fuentes consultadas por Trama Urbana, al menos tres personas armadas ingresaron al barrio El Quimilar, el cual se encuentra emplazado en la zona de 10 y 467. En una de las viviendas, los cacos ingresaron luego de romper una ventana que da al living y, una vez que estuvieron dentro, fueron sorprendidos por la propietaria.
Esta relató luego a la Policía que, al escuchar ruidos, encendió una alarma, por lo tanto, los implicados se dieron a la fuga sin poder llevarse nada. No obstante, se informó que poco antes habían atacado a otra familia, la cual no corrió con la misma suerte.
En este segundo domicilio, se robaron una gran suma de dinero, cuya cifra no trascendió. Debido a esto, los frentistas piden mayor seguridad, dado que no es la primera vez que sucede, sino que hace apenas poco más de una semana ya habían sufrido otro hecho similar.
Como bien informó en exclusiva este multimedio, una familia platense sufrió una brutal entradera en su casa, ubicada en un barrio semicerrado, el pasado 17 de abril. Según los testigos, todo se desarrolló en una vivienda emplazada en la zona de las calles 13 y 467, donde atacaron unos ladrones armados.
No está del todo claro si las personas encargadas de la misma notaron algo o también fueron reducidas, pero lo cierto es que los hampones lograron ganar el interior de la propiedad escogida de manera violenta. Una vez adentro, sorprendieron a los moradores, integrantes de una familia, y los redujeron de inmediato sin darles tiempo a nada.
Con la situación completamente dominada, comenzaron a recorrer las instalaciones y se adueñaron, de esta manera, de diferentes elementos que consideraron de valor, así como también del dinero en efectivo que allí había, cuya cifra (aunque sería alta) no trascendió.
Con el botín asegurado, resolvieron darse a la fuga dejando a los damnificados maniatados e indefensos y se perdieron de vista con rumbo desconocido.
Las víctimas, poco después y como pudieron, lograron zafarse y se comunicaron con el servicio de emergencias 911, pero los agentes de la comisaría Décima, con jurisdicción en la zona, no pudieron dar con los implicados, de quienes, hasta el cierre de esta edición, nada se sabe.