Expareja de Poch contó que por una paliza suya habría perdido un embarazo

La mujer declaró como testigo de identidad reservada y sin la presencia del acusado. Una vez finalizada, el abogado Rimada contó los padecimientos que ella sufría

En el cuarto día de audiencia debate en el juicio que se le sigue a Cristian, “Conde”, Martínez Poch, declaró una empareja en calidad de testigo de identidad reservada. La mujer pidió que el acusado ni la prensa estuvieran presente, tras lo cual relató su odisea.

Una vez concluía la declaración de la testigo, el abogado que patrocina a Vanesa Rial -Julián Rimada-comentó ante los medios que ella “es la primera expareja que declara, de las 15 ó 16 que se sumaron en la causa. Confirmamos básicamente lo que sospechábamos, que era un manipulador, un golpeador, que la aislaba totalmente del mundo; es un caso típico de violencia de género”.

El letrado también señaló que la mujer -con quien el imputado tiene una niña- tuvo que irse de La Plata a vivir a la localidad de Tres Arroyos porque, a raíz de una paliza, habría perdido una gestación que tenía dos meses de embarazo.  “No tenía celular porque se lo había sustraído Martínez Poch, se fue con 20 pesos de la casa corriendo porque vio la puerta abierta”, señaló.  A pesar de ello, “él la seguía torturando a través de llamados telefónicos, mensajes y hostigamiento”, relató.

“Una vez que ella llegó a Tres Arroyos, él logró convencer a la familia que ella tenía la culpa de todo. Hasta ese punto de perversión tenía Poch”, dijo Rimada. Agregó que “el nivel de impunidad que tenía -el imputado- porque fueron muchas años, muchas las exparejas, la gente con las que se manejaba, tenía armas. Estas mujeres el temor que le tenía era grande”. 

Recusación al juez

Previo al inicio de la audiencia debate, el defensor del acusado, Martín Cerolini, recusó al presidente del Tribunal Criminal Nº1, Juan José Ruíz. El motivo fue que el magistrado, el día anterior y tras la declaración de Patricia Acosta -vecina de Martínez Poch- la felicitó por su valentía y aclaró que quedó sorprendido, ya que “desde el ’95 que ejerzo el derecho penal y defiendo las garantías constitucionales, quedé conmovido”.

Los jueces hicieron un cuarto intermedio para resolver la cuestión. De regreso, la Dra. Carmen Palacios Arias, en su calidad de vocal sostuvo explicó que “la recusación es un elemento excepcional que prevé la ley procesal y que tiende a cuestionar la imparcialidad de un magistrado para continuar con un debate, toda vez que se tiende a cuestionar a un juez que se encuentra constitucionalmente instituido”.

“Entiende este tribunal que ninguna de las dos circunstancias se han configurado.He tomado nota de lo que el señor defensor alega, como causante de recusación, de que el Dr. haya ponderado la comparecencia de la testigo para contar lo que relató durante el debate, su valentía en haber comparecido y el haberla tuteado. Esto no configura causales de recusación”, señaló la magistrada.

Para finalizar, Palacios Arias dijo que “de ninguna manera, el Dr. Ruíz ha valorado el contenido de su testimonio. El señor defensor, en ningún momento durante la declaración de la testigo, ni después, ha cuestionado la dirección del debate ni se ha dejado constancia en el acta de ningún cuestionamiento que ahora señala. De manera tal que este tribunal decide no hacer lugar a la recusación al juez”.

La otra magistrada que también integra el tribunal como vocal, María Isabel Martiarena, adhirió a la decisión de su colega, con lo cual Ruíz fue ratificado al frente del tribunal. En tanto, el lunes próximo van a declarar entre otros, una abuela de las víctimas.