Ladrones golpearon a una mujer y sus tres hermanitos

Ocurrió en 86 y 23, donde la damnificada se mudó hace apenas un mes. Los menores tienen 11, 10 y 7 años. En el lugar se encontró el tambor de un revólver

El domingo por la noche, una mujer de 26 años, estudiante de Psicología, fue víctima de un violento robo ocurrido en su casa de 86 y 23, donde tres sujetos armados ingresaron luego de romper a patadas la puerta trasera. Los malvivientes la golpearon y maniataron, al igual que a sus tres hermanos y su hija, todos menores de edad.

Trama Urbana dialogó con la damnificada, identificada como Kiara Sánchez, quien dio detalles de lo ocurrido. “Eran cerca de las 22 cuando escuché unos ruidos muy fuertes del fondo, pero cuando fui a ver me di cuenta de que habían roto a patadas la puerta trasera y tres hombres se habían metido”, dijo la mujer, quien agregó que los sujetos “estaban todos armados”.

“Mi madre estaba trabajando. Yo estaba con mis tres hermanos menores, de 11, 10 y 7 años, y mi hija, que tiene 2. Nos tiraron al piso, nos ataron, nos amordazaron y a los chicos los metieron en el baño”, comentó afligida la perjudicada.

Notablemente asustada, detalló el accionar de los ladrones: “Me golpearon a mí y al más chico de mis hermanos. A él le dejaron un chinchón muy grande en la cabeza”. A su vez, aseveró: “Fue el susto de mi vida, porque nunca me había pasado algo como esto. Hace apenas un mes vine a vivir acá”.

Luego de reducirlos, los delincuentes revolvieron toda la finca en busca de efectivo u objetos de valor, dejando un gran desorden en el interior. “Dieron vuelta la cama de mi mamá, pensando que ahí teníamos algo. También sacaron todos los cajones del ropero para buscar dinero, pero no encontraron nada”, remarcó la damnificada.

Los hampones solo lograron llevarse 120 pesos, un DVD, una tablet y celulares, junto con prendas y unos bolsos de Kiara, donde tenía toda su documentación, para luego darse a la fuga. “Salieron por la puerta de adelante y se llevaron mis llaves. Ahora tengo miedo de que vuelvan. Creo que se fueron caminando porque no escuche ningún auto o moto”, detalló. 

Por último, la joven logró liberarse por su cuenta, aunque tuvo que cortar con un cuchillo las sogas de sus hermanos debido a que los habían atado muy fuerte, lastimando sus muñecas. En cuanto a los autores del hecho, hasta el cierre de esta edición continuaban prófugos.