Menores sin control: ataques en Tolosa y el centro
En uno de los hechos molieron a palos a un playero para robarle $1.000, mientras que en el otro a un nene de 10 años lo encontraron robando en un comercio.
La inseguridad es sin dudas uno de los problemas más importantes a resolver en la región, pero también es preocupante la edad de muchos de los involucrados en hechos delictivos. En las últimas horas, varios menores protagonizaron sendos robos en diferentes puntos de la ciudad.
El hecho que más llamó la atención es el que involucra a un nene de tan solo 10 años. Según se informó, ocurrió durante la madrugada del martes, cuando una banda de tres delincuentes ingresó a un local ubicado en 8 y 51.
El damnificado avisó al 911 que malvivientes habían forzado la entrada de su local y que se habían llevado varios elementos, por lo que la Policía realizó un operativo cerrojo y lograron dar con uno de ellos, encontrando en su poder dos parlantes.
Si bien se recuperó lo robado y se puso bajo custodia al implicado, luego el fiscal dispuso se diera intervención a Niñez y que el nene fuera devuelto a su padres a causa de su edad. Asimismo, el episodio quedó registrado bajo la carátula de “robo”.
Por su parte, el segundo episodio se dio en una estación de servicio de la localidad de Tolosa y tuvo como involucrados a una banda de cuatro menores, los cuales también atacaron una agencia de venta de motocicletas ubicada a pocas calles.
El lugar fue 17 y 532, en donde los maleantes tomaron por sorpresa al empleado, a quien sometieron a una salvaje golpiza y le quitaron 1.000 pesos, tras lo cual escaparon sin poder ser atrapados por la Policía. No obstante, la situación no iba a terminar allí.
Es que menos de 24 horas más tarde los mismos sujetos protagonizaron un robo en 13 y 526, de donde se habían robado una moto de una agencia tras romper el blindex, por lo que los uniformados salieron tras ellos.
Así, encontraron a dos de ellos en 17 y 529, cuando intentaban robarse otra motocicleta y los atraparon antes de que pudieran escaparse. Ya bajo arresto, los identificaron como dos menores de 15 años, para luego mantener comunicación con la UFI Joven n° 2, que avaló el procedimiento, impartiendo la directiva de que se realizara constancia de domicilio y se hiciera la entrega de los menores a sus progenitores.