Persecución, tiroteo y un baleado en pleno microcentro platense
Dos ladrones huyeron de la Policía por avenida 7. Chocaron contra un auto, que volcó, y un camión. Fiscalías, un jardín y una mujer con un bebé, en medio del desastre.
Momentos de verdadera locura y desprecio por la vida ajena se vivieron ayer en pleno microcentro platense, cuando policías y delincuentes se tirotearon de manera brutal y salvaje en medio de una gran cantidad de personas, en el marco de un robo fallido.
Fuentes oficiales le contaron a Trama Urbana que el dramático suceso comenzó alrededor de las 11 de la mañana de este viernes en la zona de 1 y 53, donde dos ladrones a bordo de un auto interceptaron a un hombre y pretendieron quitarle el dinero que llevaba encima.
No solo no lo consiguieron, sino que la maniobra fue advertida por un miembro de la fuerza de la división Motorizada, que pidió refuerzos y empezó una persecución. Los hampones enfilaron hacia el centro, a bordo de un Fiat Siena de color blanco, y ya sobre avenida 7 dispararon hacia los uniformados, que repelieron la acción de la misma manera.
En total, se produjeron al menos quince tiros, y una gran cantidad de vainas servidas que quedaron tiradas en la calle así lo demostraron.
7 y 58, punto final
Ya en 7 y 55 el coche de los malvivientes chocó contra otro conducido por una mujer, que iba por la avenida y terminó volcando. A continuación, el malhechor al mando del rodado dobló en U y en contramano por 58, donde colisionó contra un camión que repartía bebidas y se encontraba en la puerta de un restaurante de comida peruana.
Desesperados, los delincuentes descartaron el arma de fuego, que cayó en el pallet del vehículo del repartidor. Instantes después, ambos fueron arrestados y se corroboró que uno de ellos sufrió un disparo en el brazo, que lo tenía completamente ensangrentado.
“Pudo haber sido una verdadera tragedia”, señaló un vocero ante este diario, y amplió: “Había muchas personas caminando, incluso casi atropellan a una mujer con un bebé. Y los repartidores se salvaron de milagro”.
Para graficar lo grave del asunto, durante la fuga a los tiros, las partes involucradas pasaron por ministerios, fiscalías, tribunales, un jardín, una primaria, paradas de taxi y numerosos comercios.