Profundo malestar vecinal tras un nuevo cambio en comisarías platenses

La cruda, creciente y -ya a esta altura- cotidiana inseguridad en La Plata se llevó puestos en las últimas horas a dos comisarios, que fueron relevados de sus cargos en medio de fuertes protestas vecinales por los contantes robos.

Aunque todavía resta la confirmación oficial, ya trascendió que las modificaciones tendrán lugar en la castigada subcomisaría de Gorina y también en la de Arana. En la primera, y tal como informó Trama Urbana en su edición anterior, anteayer dos motochorros ingresaron a una casa emplazada en las calles 135 entre 490 y 491 tras trepar un paredón, se llevaron dinero, joyas y otros elementos de valor y le dispararon al menos dos veces a la dueña de la morada. Si no la hirieron fue puramente de milagro y casualidad, ya que los tiros fueron en su dirección. Pese a que todo ocurrió a plena luz del día -alrededor de las 11:20- y parte del lamentable y gravísimo suceso quedó registrado en una cámara de seguridad, hasta el cierre de esta edición las autoridades de la fuerza no habían podido dar con los responsables, que continúan prófugos y haciendo de las suyas.

Tras el violento atraco, los lugareños se manifestaron y sentenciaron que “estamos a la buena de Dios, acá no nos cuida nadie y cosas así pasan todos los días”.

Lejos de intentar solucionar el conflicto, desde la Jefatura Departamental La Plata, dirigida por Sebastián Perea, resolvieron ir por la más fácil: relevar a Miguel Martínez, el titular de la seccional ubicada en 140 bis y 492. En su lugar llegará Martín Robledo, con el fin de intentar apaciguar los caldeados ánimos.

Enojo de un frentista

Desde el Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires también indicaron que desplazarán al encargado de la subcomisaría Arana, localizada en la zona de 637 entre 131 y 131 bis. Sergio Gómez sería el apuntado para reemplazar a la mandamás actual, Rita Guerrero. La jefa estaba en su cargo desde marzo de 2021.

Claro que estas decisiones lejos están de paliar la inseguridad que se respira en cada esquina de la capital bonaerense. “El problema es que no los sancionan: los rotan. Van dando vueltas por todas las comisarías platenses. Ya estamos cansados de los cambios para que nada cambie. Acá se necesitan más patrulleros en la calle, más caminantes y más velocidad ante cada llamado al 911, que muchas veces ni siquiera se atiende”, se lamentó un vecino de una ciudad que perdió la calidad de vida que supo ostentar. “Antes no se podía caminar de noche, pero ahora ni siquiera de día. Está repleto de motochorros, circulando por todos lados sin que los detengan”, culminó el frentista.