Siguen los robos en La Plata: cuatro motochorros encañonaron a un repartidor

Ocurrió en pleno casco urbano, cuando la víctima acababa de entregar un pedido. A dos kilómetros un ladrón ingresó en dos edificios, y también hubo un asalto en Villa Castells.

La inseguridad en los distintos puntos de la ciudad de La Plata no se detiene y, en ese sentido, hay que contar decenas de robos a diario, sin que la fuerza de seguridad pueda ponerle un freno al flagelo que tanto preocupa a la sociedad.

En las últimas horas hubo que lamentar nuevos sucesos, bajo un mismo parámetro: la impunidad, ya que por ninguno de los casos las autoridades policiales lograron dar con los implicados.

Por un lado, otra vez un repartidor fue víctima de la delincuencia, en pleno caso urbano. El joven se acercó a bordo de su bicicleta hasta un edificio ubicado en la zona de 5 y 45, a las 20.50 del jueves. Una vez que fue atendido por el cliente, entregó el pedido y recibió el dinero, se preparó para marcharse y continuar con su trabajo, pero entonces fue interceptado por cuatro motochorros, a bordo de dos ciclomotores.

Bajo amenazas de muerte y apuntándolo con armas de fuego, lo obligaron a entregar cada una de sus pertenencias, algo que el damnificado obedeció sin resistirse en ningún momento. “Le sacaron el dinero que llevaba consigo, cuya cifra no pudo precisar, y también su celular”, indicó un vocero ante Trama Urbana.

Con todo eso en su poder, los hampones se dieron a la fuga con rumbo desconocido, y si bien todo quedó registrado en una cámara de seguridad privada, hasta el cierre de esta edición nada se sabía de los autores del atraco.

Temor en 45 entre 30 y 31

A unos dos kilómetros de allí, los residentes de dos edificios vivieron momentos de temor durante la madrugada de ayer, ya que al menos un ladrón logró ganar el interior de los mismos con fines delictivos.

En esta oportunidad, el incidente se materializó en dos construcciones linderas emplazadas en 45 entre 30 y 31. El malviviente barreteó portones sin llegar a romper vidrios y se acercó hasta la sala de máquinas. Un vecino que salía para trabajar, alrededor de las 5, llegó a verlo justo cuando se estaba retirando.

Los habitantes de los edificios detallaron que no llegó a llevarse nada y aseveraron que la Policía les dijo que “entró para robar algo de la sala de máquinas o para ver el lugar, estudiarlo y volver mas adelante, solo o con cómplices”.

Lo cierto es que el delincuente se fue sin llamar la atención y pese al miedo que dejó en los que allí viven todavía permanece prófugo. “No hay muchas pistas para ubicarlo, a decir verdad”, se resignó un portavoz ante este multimedio.

Golpes en una verdulería

En tanto, un grupo numeroso de motochorros perpetró en las últimas horas un violento asalto en una verdulería de Villa Castells ubicada en 499 y 11. Ingresaron armados, obligaron a tirarse al piso a todos los presentes y le pegaron en la cabeza al dueño. Tras apoderarse del dinero que había en la caja registradora escaparon, no sin antes sacarle también la billetera a una clienta.

Noticias Relacionadas