Traumático robo en casa de una octogenaria

Dos asaltantes sorprendieron a una jubilada, que vive en Tolosa. Le sacaron dinero, alhajas y elementos de valor. Debió recibir asistencia médica 

Ladrones sin ningún tipo de respeto fueron los que asaltaron ayer a una jubilada de 86 años en su casa de Tolosa, ya que la engañaron para cerciorarse de que estaba sola y después  le robaron el dinero de su jubilación y alhajas, dejándola en la cama con un gran pico de presión que requirió de asistencia médica. 

Sus familiares, en diálogo con este medio, contaron: “Aparecieron dos personas, una de ellas con muletas, a las 11. Tocaron el timbre y los atendió. Le preguntaron por un odontólogo y después se fueron. Querían saber si estaba con alguien. Al ver que no y que ella usa un andador para caminar, se aprovecharon de eso”. 

Luego, la víctima, Edith Noemí Leutelde, escuchó ruidos, pero “creyó que eran las dos personas que viven con ella”. Sin embargo, eran los mismos hombres, que ingresaron forzando una persiana y rompiendo la ventana. 

“Ella estaba recostada y fueron para la habitación. Le pidieron que no los viera, la amenazaron de muerte y le exigieron plata. Edith es asmática y le cuesta hablar, por lo que les indicó todo con señas”, aseguraron sus parientes. 

De esa manera, los cacos se apoderaron “del dinero de la jubilación y las joyas que tenía en una cajita, luego de haber revisado todo el cuarto”, concluyeron los voceros. 

Consumado el ilícito, se fueron a pie sin revisar las otras dependencias, saliendo nuevamente por la ventana.

“Creemos que marcaron el lugar. Es una nueva modalidad, que ya se dio acá, esto de meterse en los domicilios de personas de la tercera edad”. 

Agentes de la Jefatura Distrital Norte fueron hacia el lugar, en 531 entre 115 bis y 116, y salieron detrás de los autores. “Uno tenía 25 años y el otro 20, aproximadamente. Alguien los vio irse para 32 y 116 pero después no se supo más”. 

Lo más importante, sin embargo, fue la salud de la anciana. “Llegó a tener 18 de presión y tuvo que venir una ambulancia del SUM para darle oxígeno, aunque ahora se encuentra mejor y descansando”. 

No llegaron a golpear a la abuela, pero sí la amenazaron y le dijeron “que no hablara ni intentara pedir ayuda”, según un vocero de la fuerza. 

En el lugar trabajó la Policía Científica aunque aún se desconoce si logró recolectar elementos de valor probatorio para la causa. 

Noticias Relacionadas