Con música y asado, los argentinos palpitaron el pase a la final desde Nueva Jersey
Los hinchas albicelestes disfrutaron de la previa del partido frente a Canadá por las semifinales de la Copa América. Hubo asado, música y mucha alegría en el estacionamiento del MetLife Stadium.
Una sana costumbre. Tal cual sucedió en la antesala al partido contra Chile por la segunda fecha del grupo A de la Copa América, ayer por la tarde los hinchas de la Selección Argentina reeditaron las tradiciones patriotas antes del encuentro con Canadá por la semifinal del certamen continental.
Pese al calor y la humedad de la tarde de New Jersey, que no tuvo comparación con la alta temperatura pasional que pudo palparse en el estacionamiento del MetLife Stadium, Argentina derrotó a Canadá por las semifinales de la Copa América en Estados Unidos y logró acceder a una nueva final, la cuarta consecutiva. Como ocurrió en cada juego, el público argentino se hizo notar por encima del resto, con sus picardías, bromas y los típicos asados, llamados barbacoas en este país, adornaron un paisaje único e inusual por estas tierras.
Grupos de amigos, familias y algunos otros que se hacen unos dólares se sumaron a una costumbre del público norteamericano en la previa de cada evento deportivo.
Los canadienses participaron del asado también, aunque no son de compartir las bebidas y menos las alcohólicas. Gente de India, Bangladés, Guatemala, Estados Unidos y hasta Australia posaron con sus camisetas argentinas. El MetLife lució de celeste y blanco, con más adhesiones a Argentina que argentinos, y esa conquista es parte del legado de Lionel Messi a nivel mundial.
El “banderazo”, otra sana costumbre argentina
La gente se acostumbró a la fiesta previa a cada partido de la Selección. Nuevamente en New York, y en el Time Square, pero en menor número que hace dos semanas cuando la Selección enfrentó a Chile, se reunieron en ese lugar unos 2.000 fanáticos que vistieron la zona de celeste y blanco. Pero, además, se divisaron camisetas de Vélez, Lanús, Boca, River, entre los equipos más importantes del fútbol argentino.
A diferencia de aquella vez, en el que la policía local apareció 10 minutos después para controlar y evitar situaciones problemáticas, que no las hubo, en esta ocasión la zona se encontraba vallada desde el comienzo y con mucha presencia policial. Una, dos, tres, cuatro cuadras, el lugar de a poco se fue convirtiendo en una marea celeste y blanca.
Hubo personalidades ilustres, además de los hinchas propiamente dichos, y fue el expresidente de River, Rodolfo D’Onofrio, quien se excusó de hablar ante la prensa, pero disfrutó de las dos horas que se mantuvo la batucada entonando el cancionero de la Selección.