“El ARA San Juan se llevó a un compañero, a un buen tipo”

A Víctor Bernay, ayudante técnico de Pedro Troglio, la tragedia del submarino lo tocó de cerca debido a la desaparición del teniente de navío Fernando Mendoza, a quien dirigió y con el que tuvo una relación de amistad en Concordia 

La desaparición del submarino ARA “San Juan” mantiene en vilo a la sociedad argentina y el mundo hace tres semanas. A pesar de que la Armada decidió suspender el protocolo de rescate, la búsqueda del buque, impulsada por la fe y la esperanza de los familiares y amigos, no se detiene. 

Mientras tanto, las historias de los 44 miembros de la tripulación comenzaron a surgir, y entre ellas se encuentra la del teniente de navío Fernando Mendoza, quien durante su adolescencia, en su Concordia natal, al mismo tiempo que soñaba con formar parte de la Marina despuntaba el vicio en algo que también lo apasionaba: el fútbol. 

En los primeros años de su juventud, Mendoza se acercó al club Salto Grande y rápidamente quedó para integrar la categoría 1979, que por aquel entonces era dirigida por otro joven que también daba sus primeros pasos en este deporte: Víctor Bernay, actual integrante del cuerpo técnico de Pedro Troglio en Universitario de Perú y con un exitoso paso en Gimnasia que se extendió por muchos años. 

“Fernando fue jugador mío en Salto Grande. Llegué al club con Rubén Cortiana y a partir de ese trabajo lo conocí. Era un muchacho muy querido, excepcional. Sumaba mucho en el grupo y era reconocido por sus compañeros por la buena predisposición. Como ocurre en este tipo de ciudades, cuando termina la secundaria muchos emigran en busca de su futuro y él fue a buscar el suyo”, comentó Bernay en contacto con este medio. 

“La noticia golpeó mucho a Concordia porque era un muchacho muy bueno, ordenado y prolijo. He seguido de cerca lo que viene pasando y no había perdido la fe hasta que los partes oficiales comenzaron a hablar de otra cosa. El ARA San Juan se llevó a un compañero, a un buen tipo. Él y todos sus colegas me dejaron una gran enseñanza. Era una obligación moral escribirle en las redes sociales, y cuando regrese a la ciudad voy a darle un abrazo a la familia”, concluyó. 

“Nos juntamos con Pedro para ver a Gimnasia”

El vínculo afectivo de Víctor Bernay con Gimnasia quedó sellado para siempre. A pesar de no haber nacido en el club, construyó un cariño recíproco y especial por formar parte del cuerpo técnico de Pedro Troglio, quien es considerado uno de los máximos ídolos de la institución, que en la actualidad se mantiene intacto.  

“Nos juntamos con Pedro en su casa para ver al Lobo. Siempre voy a estar agradecido al club por haberme abierto las puertas. No solo trabajé, sino que viví más de tres meses en La Casona y eso tiene un valor muy importante. Observo que es un equipo que está en crecimiento con partidos en los que mereció mejor suerte como sucedió ante Lanús”, cerró.  

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