El arquitecto del gran sueño argentino

El capitán del equipo de Copa Davis, Daniel Orsanic, dialogó con diario Hoy a dos semanas de afrontar la final ante Croacia en Zagreb. Durante la entrevista habló, entre otras cosas, de su vinculación con el país europeo y la inmejorable oportunidad de ganar por primera vez la Ensaladera

El  equipo argentino llegó en cuatro oportunidades a la final del torneo más importante a nivel de selecciones.

En 1981, de la mano de los grandísimos Guillermo Vilas y José Luis Clerc, el conjunto nacional no pudo ante Estados Unidos de visitante y cayó por 3 a 1; en 2006 fue el momento de presentarse en Rusia, donde también fue derrotado, esta vez de manera ajustada, 3 a 2; quizás las más recordadas (ambas caídas se dieron por el mismo resultado, 3 a 1), fueron la de 2008 en Mar del Plata, ya que no se supo aprovechar el contexto favorable teniendo en cuenta la expectativa que había, y la de 2011, visitando a una poderosísima España.

En ese contexto, con tanto camino recorrido, el propio Daniel Orsanic, que, paradoja del destino, tiene a su padre nacido en Croacia, charló con este medio y deslizó su parecer acerca del momento actual del tenis argentino, el análisis del rival y la oportunidad de quedar en la historia grande del deporte nacional, a dos semanas de la gran final.

—¿Tenés tu corazón también en Croacia?

—Tengo sangre croata, es cierto, pero nací en Argentina y obviamente mi corazón está en nuestro país. Mi papá nació en Croacia, mi mamá es argentina, y mi abuelo falleció cuando yo era recién nacido; después, con el tiempo, escuchaba a mi abuela hablar con mi papá en croata, pero no me enseñaron casi nada. Lo cierto es que escaparon de la guerra en su momento, y quizás no quisieron compartir mucho.

—¿Te satisface el rendimiento del equipo y el momento en el que llegan los jugadores?

—Tengo la convicción de que son los mejores cuatro jugadores que nos pueden representar en esta final, nos hemos tomado un tiempo prudencial para decidirlo, al margen de que sean los mismos de la semifinal ante Gran Bretaña. Presentan un gran momento personal y le han dado puntos importantes al equipo a lo largo del certamen. Sin embargo, no es solo por haber sido partícipes de la semifinal, sino por sus buenos rendimientos. Estoy ansioso por vivir la final, tenemos que llegar en el mejor nivel. Me siento muy contento por el momento del tenis argentino y por ser partícipe de esta instancia.

—¿Cómo están trabajando la final desde lo anímico?

—Entendemos que hay una expectativa mayor al haber llegado a otra final, la quinta en este caso, pero desde nuestro lado es muy importante pensar en la preparación, en que es una serie más; cada enfrentamiento lo tomamos con mucha responsabilidad. Vamos a necesitar un nivel de tenis muy alto, nuestro foco está puesto en eso, más allá de la instancia, en representar con dignidad y de la mejor manera al país. Pensamos solamente en eso, aunque aceptamos y entendemos lo que generamos puertas afuera, y el fervor con el que se va a vivir la serie. Será clave tener la cabeza fría en los momentos cruciales.

—¿Qué opinión te merece semejante progresión de Del Potro?

—Su evolución sigue, continúa. Estoy muy contento por verlo en actividad, más allá de que represente al país en las diferentes competencias. Después de estar tanto tiempo inactivo, pudo volver a hacer lo que más le gusta. Es un efecto contagio que repercute en los más chicos, y tener un referente de la categoría de Juan Martín es muy importante para todos.

—¿Cómo ves a Croacia?

—Croacia es un rival muy completo, con grandísimos jugadores. Marin Cilic es su bandera, y hoy la mejor raqueta. Imaginate que le pudo ganar al número uno del mundo e ingresó al Masters; se conoce demasiado con Delpo. Después está Ivo Karlovic quien, pese a su edad (37 años), tiene uno de los mejores saques del circuito y es un jugador que siempre complica, en el marco de su inconsistencia. Serán locales, tienen un dobles fuerte y viven un gran presente, pero confío mucho en el equipo y en que vamos a hacer una gran final.

—¿Cuál es la clave para vencerlos?

—En realidad, todos los momentos del partido serán claves. Insisto: es un equipo muy fuerte, que sabe lo que tiene y a lo que juega. Noso­tros tenemos lo necesario como para contrarrestarlos, pero también será fundamental que la ITF corrobore bien el escenario, y que esté todo en regla. Ya lo vivimos con Polonia, cuando jugamos en una cancha antirreglamentaria. Hacerlo otra vez inclinaría mucho la balanza para el local, por velocidad y dimensiones. 

Cuánto cuestan las entradas para acompañar al equipo nacional

Esperando con ansias el duelo final entre croatas y argentinos, sujetos a disponibilidad, los abonos de categoría 1 costarán 1.400 pesos; los de categoría 2, $1.200; y los de categoría 3, $900. El máximo de compra será de dos (2) abonos por persona.

Por otra parte, se sabe que un viaje, incluyendo estadía en Croacia, no será accesible. Las agencias de turismo ofrecen los paquetes para viajar a Zagreb hace poco más de una semana, con precios que van desde los 2.000 dólares (unos 30.000 pesos) hasta los 3.000 (alrededor de 45.000 pesos) por cuatro días. Los montos varían de acuerdo a la categoría del hotel elegido y a la ubicación en el estadio Arena Zagreb.

Otra de las dudas en torno a la final es el valor de las entradas. Sin embargo, teniendo en cuenta los precios con los que se comercializaron los pases de la semifinal ($3.500), se espera que el piso, por las tres jornadas, sea de $5.000, siempre teniendo en cuenta la categoría 3, que es la ubicación más económica. 

En el caso de la categoría 1, ese valor podría llegar a superar los $10.000.

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