El remo de la región, en lo más alto
Tras lograr el primer puesto en el Campeonato Argentino de Velocidad, la platense Merlina Pierini visitó este medio y contó su experiencia en Santa Fe representando al Club Náutico de Ensenada
Merlina Pierini practicó durante muchos años gimnasia artística. Sus condiciones y compromiso con la disciplina la hicieron poder llevar su talento al Cenard, junto a miles de deportistas argentinos que luchan y sueñan con llegar a lo más alto. Sin embargo, una lesión en el tobillo izquierdo, lamentablemente, la alejó de la gimnasia y a sus 24 años, la platense del barrio de Los Hornos encontró una nueva motivación: el remo.
En el último mes, Pierini tuvo la oportunidad de representar por segunda vez, de manera oficial, al Club Náutico de Ensenada y, tras una destacada actuación, se consagró campeona argentina de velocidad en 500 metros, en Villa Constitución, Santa Fe.
“Hace dos años que empecé a remar, me atrapó porque es un deporte muy exigente y completo. Todos los días aprendés algo nuevo”, confesó Merlina.
Cabe marcar que la deportista de nuestra ciudad rompió una racha de sequía en el Club Náutico, ya que desde 1955 ningún deportista local ganaba una regata. Por este motivo, Merlina se ilusiona aún más con lo que le deparó el destino, ya que además dentro de unos años finalizará su carrera profesional de Planificación en la Facultad de Periodismo.
“Divido mis tiempos entre el estudio y lo que más me gusta hacer, el deporte”, expresó la ganadora de la última competición en Santa Fe, quien gentilmente se acercó a la redacción de diario Hoy y contó sus sensaciones y deseos de cara al futuro.
—¿Cuál fue la clave del triunfo?
—Pude ganar tanto la última, que fue en Villa Constitución, de 500 metros, como las regatas normales, de 2.000. El clima no acompañó, por el frío y el viento, pero por suerte salió como lo soñé. La clave fue la concentración y todo el entrenamiento previo para llegar de la mejor manera.
—¿Cuáles son tus próximos objetivos?
—Apunto al Campeonato Argentino de Remo, en noviembre, porque se compite a nivel nacional, y es ahí donde se define quiénes son los mejores del país en cada categoría.
—¿Es importante el apoyo de la familia ?
—Sí, obviamente. Siempre me apoyan. Amigos como Carlos Núñez y Luis Sánchez, junto a mi profesor, Roberto, también son responsables de mis logros.
—¿Cómo describís al remo?
—Se establece una relación de amor y odio con este deporte. Creo que nos pasa a todos los remeros. Es muy sufrido, tenés trabajos duros y regatas de hasta 2.000 metros. Pero es motivador, me encanta estar en el río, conozco mucha gente que ama lo que hace. Es increíble, hermoso y hay que dejar la vida.