F1: malestar, vómitos y un abandono forzado, el vía crucis de los pilotos en el GP de Catar

La última carrara de la Máxima fue reconocida por todos los pilotos de esa categoría como una de las más duras que han hecho nunca. Esteban Ocon resumió la carrera como “un infierno”.

Si bien Medio Oriente ya comenzó su otoño, las altas temperaturas no cesan y este domingo los 31 grados en la noche de Lusail hicieron estragos en varios pilotos durante la disputa del Gran Premio de Catar de Fórmula 1. Fueron impactantes las imágenes de los competidores tirados en el piso, pedido de agua en la paradas en los boxes, uno que debió abandonar y otro que vomitó. Y lo que llama la atención es que quienes integran esta élite de 20 pilotos son atletas súper entrenados y varios de todos ellos no superan los 25 años.

Cabe recordar que los pilotos sufren más la temperatura arriba del auto por el calor del motor y el buzo antiflama. A diferencia de la primera visita de la Máxima a Catar, que fue el 21 de noviembre de 2021, con una temperatura más cómoda para los competidores, esta vez el calendario puso el evento para el 8 de octubre. Algo que llamó la atención ya que se podría haberse pasado para el final junto con la última fecha que suele llevarse a cabo en Abu Dabi.

Combinar estas dos carrera en la región hubiese sido lo ideal por un tema de la temperatura, pero también por cuestiones de logísticas y economía. Pero Liberty Media, dueña de los derechos comerciales de Formula One Management (FOM), cometió el error de llevar a cabo la carrera en Catar en esta fecha. Cabe recordar que este país firmó contrato hasta 2030. Por suerte para los pilotos, en 2024 figura el 1° de diciembre.

Lo cierto es que se vieron a varios pilotos complicados como el caso de Logan Sargeant (22 años), que le anticipó al equipo Williams su posible abandono. “No me encuentro muy bien”, dijo el estadounidense. “Es tu decisión. No hay que avergonzarse por parar si te sientes mal”, le contestaron. El norteamericano desertó en el giro 40, ingresó a boxes y le costó bajarse de su auto.

Fernando Alonso, que a sus 42 años se muestra cada vez más óptimo en lo físico, antes de hacer una de sus detenciones en los boxes le preguntó a su escudería, Aston Martin: “El asiento está ardiendo. ¿Hay algo que podamos hacer en la parada en boxes? ¿Tirarme agua o algo así?”. El español culminó sexto y al descender de su monoplaza se agachó en dos oportunidades y debió apoyarse en la rueda delantera izquierda.

Esteban Ocon (26 años), por su parte, vomitó en su casco y en esas condiciones corrió el resto de la carrera en la que pudo terminar séptimo con su Alpine.

En tanto que los corredores de McLaren, quienes completaron el podio, afirmaron que fue la carrera más dura de sus vidas. “El auto tuvo un muy buen ritmo. Fue la carrera más difícil que tuve en mi vida. En medio de esta carrera con mucho calor los neumáticos terminaron enteros”, contó el australiano Oscar Piastri.

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