por galopón
Lagarto Boy rompió el maleficio: por fin pudo ganar en esta pista
Con la acertada conducción del jockey Wilson Moreyra se alzó con el Clásico Antonio Cané (G III-2.100 mts.) “arañando” el récord. En su cuarto intento, pudo ganar en este hipódromo.
Por GALOPÓN
Jueves de acción en el teatro del turf del barrio Hipódromo que levantó el telón para ofrecer 13 carreras en su cartelera. Y a pesar de lo desapacible de la tarde, hubo bastante público en el recinto hípico. En ese marco se disputó el Clásico Antonio Cané (G III-2.100 mts.), alzándose con un incuestionable triunfo Lagarto Boy que de esta forma quebró una maldición, ya que venía de tres segundos consecutivos en esta pista. Postergó por diez cuerpos a Galán Galés, que por medio pescuezo dejó tercero a Picaflor Letal.
El cotejo, reservado para todo caballo de tres años y más edad, a peso por edad, sin Australis Cheeky, fueron seis los competidores y el cierre de las apuestas mostró el claro favoritismo de Lagarto Boy con un sport de $1.65 sobre las chances de Súper Inter ($2.80) y de Galán Galés ($3.70). Trasladado el pleito a la pista, el pupilo de Mayansky Neer consiguió una aplastante victoria “arañando” el record de la distancia ya que empleó 2m.09s.67/100 para los 2.100 metros de pista normal.
Primera victoria de Largarto Boy en este hipódromo
En la suelta, Largarto Boy picó en punta -tal su característica- en lucha con Súper Inter y así pasaron frente al disco por primera vez. Al encarar el codo del Colegio Nacional, el favorito corría el pescuezo de luz sobre su rival, quedando detrás Súper Barty, Galán Galés, Picaflor Letal y Kriptos, en ese orden.
Completaron la elipse y el ingreso al opuesto mostró al favorito en franca pugna con Súper Inter, logrando distanciarse del resto del lote, de tal forma que al pasar por la señal del kilómetro el puntero mantenía medio cuerpo de luz sobre su tenaz adversario, mientras que se les acerca Picaflor Letal con ganitas de terciar en la discusión al igual que Galán Galés.
Así culminaron el recorrido del opuesto y se zambulleron en la curva de la calle 41, con Lagarto Boy defendiéndose ahora de Picaflor Letal que lo fue a buscar, quedando en el medio Súper Inter, mientras que por afuera Galán Galés se sumaba a la lucha. De esa forma culminaron el recorrido de la elipse y al entrar al derecho con lujosa acción escapó el favorito, distanciándose rápidamente de sus rivales, mientras Picaflor Letal se defendía del ataque de Galán Galés por el segundo sitial.
Finalmente Lagarto Boy cruzó el disco con diez cuerpos de luz sobre Galán Galés que cerca del disco pudo quebrar a Picaflor Letal. El reloj cantó 25s.57/100 para los primeros 400 metros; 49s.79/100 para los 800 mts.; 1m.13s.52/100 para los 1.200 mts.; 1m.38s.19/100 y 2m.03s.84/100 para los dos kilómetros.