Liga Profesional
Racing y Boca empataron sin goles en el Cilindro
En los últimos segundos del encuentro hubo polémica por un posible penal a favor de Boca. El árbitro revisó a través del VAR pero decidió no cobrarlo.
En un clásico que prometía mucho en la previa por la polémica que se generó por la llegada del arquero Sergio “Chiquito” Romero al Xeneize, Boca igualó sin goles como visitante ayer ante Racing, por la decimotercera fecha de la Liga Profesional de Fútbol. Ocurrió tras un final cargado de polémica porque en tiempo de descuento hubo un claro penal para el Xeneize y el referí decidió no cobrarlo.
El encuentro se jugó en el estadio Presidente Perón con el arbitraje de Fernando Rapallini, mientras que en el VAR estuvo presente el mendocino Fernando Espinoza.
El encuentro comenzó con un dueño de casa agresivo, con una presión extendida y coordinada apenas perdió la pelota. Prueba de ello: tuvo dos chances de gol en apenas 44 segundos. Primero, un ingreso de Mena por el segundo palo tras una acción preparada; luego, un cabezazo de Galván que Fabra rechazó en la línea.
El Xeneize, en tanto, encontró algún camino saltando líneas o con algún movimiento interesante de Payero o un desborde de Villa.
A los 20 minutos, Copetti cedió para Miranda, que forzó la volada de Agustín Rossi. A los 26, tras un toqueteo atildado, Mena centró atrás para la entrada de Rojas, que elevó su intento por encima del travesaño. Y a los 29, tras una cesión de Mura, Alcaraz conectó de manera imperfecta, casi sin oposición.
En el segundo tiempo, a los cinco minutos volvió a avisar Racing cuando Matías Rojas quedó mano a mano, Rossi le tapó la pelota y en el rebote buscó definir al segundo palo y la terminó tirando afuera.
El Xeneize, poco a poco, fue animándose. Y lo pudo ganar con el remate de Medina que tapó Arias, con una irrupción de Vázquez o el lance cruzado de Villa que otra vez contuvo el portero. Ni hablar con la pelota que Mura despejó sobre la línea, tras un zurdazo de Fabra.
En el minuto 95 llegó la gran polémica del partido por una mano clarísima de Jonatan Gómez dentro del área. Sin embargo Rapallini la revisó en el VAR y decidió dar por terminado el partido, en una situación insólita, por lo que todo terminó sin goles.