Adam Driver, el villano perfecto

La historia de Kylo Ren (Adam Driver) en la nueva saga de Star Wars aún está por resolverse, y recién en el final de Episodio IX se sabrá qué lado de la fuerza prevalecerá para él, ¿el último Skywalker? Por su parte, la vida de Adam Driver también tuvo capítulos oscuros, pero que lo llevaron a ser uno de los actores más requeridos por los mejores cineastas del mundo.

Luego del 11 de septiembre de 2001 Driver se alistó en la sección de infantería del Cuerpo de Marines de Estados Unidos, pero poco antes de ir a combatir en Irak sufrió un accidente haciendo ciclismo de montaña y fue dado de baja. Tras ese episodio, decidió anotarse en la prestigiosa escuela Juilliard y estudiar actuación. “Se supone que los Marines conforman la rama más dura y rigurosa del ejército estadounidense. De algún modo, también fui el alumno más duro y autoexigente de Juilliard. No es comparable, pero aquel modo de afrontar mi nueva realidad me vino bien para seguir adelante”, confesó.

Luego de brillar en la serie Girls, su llegada a la saga se dio porque tanto George Lucas como J. J. Abrams lo querían como primera, segunda y tercera opción para ser Kylo Ren en El despertar de la fuerza. “Cuando nos reunimos por primera vez para hablar de mi papel, J. J. me recomendó que le quitase capas al villano hasta convertirlo en persona, porque lo cierto es que Kylo Ren finge ser quien no es. En realidad es un chico vulnerable que aún no sabe dónde invertir toda su energía”, explicó Driver, quien el jueves llegará a los cines con Episodio VIII: los últimos jedi.

Noticias Relacionadas